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La Superintendencia de Servicios Públicos estará presente desde el mes de marzo en Riohacha con un una oficina y el personal necesario para la darle curso a las quejas de los usuarios de los servicios públicos.

La noticia fue confirmada por Keidys Diaz Plata, coordinadora regional de la entidad quien en reunión con las autoridades locales, en un espacio gestionado por el personero distrital Yeison Deluque Guerra, contó que la oficina se instalará en la Casa de Justicia de la ciudad.

'Estamos muy contentos porque por primera vez contamos con el apoyo de una administración, que nos brinda un espacio para nosotros llegar hasta acá ya asesorar a la comunidad; dos profesionales abogados especialista en el tema llegarán a la ciudad dispuestos a capacitar y defender los derechos del ciudadano', señaló la funcionaria.

Inicialmente la Oficina de la Superintendencia contará con dos funcionarios que llegarán delegados dela regional de Barranquilla, pero existe la posibilidad de que la administración del Distrito en el convenio de que se suscribirá también apoyo con personal para hacer más dinámico el trabajo de esta oficina en una ciudad donde los problemas por la facturación excesiva y cobros de multas por empresas que no están facultadas para tal, son muy comunes.

Este jueves en la mañana en la Casa de Justicia se hizo una reunión a instancias del personero de Riohacha donde participaron el secretario de Infraestructura, Keyder Freile y de Gobierno, Miguel Pitre; y los directores de Seguridad y Convivencia Leandro Mejía y Casa de Justicia, Luz Ángela Durán el alcalde José Ramiro Bermúdez.

'No vamos a escatimar ningún esfuerzo por tener una entidad que vele por los derechos de los consumidores, hoy desde la administración y el personero del Distrito, estamos de acuerdo en que en la Casa de Justicia, se instale la oficina de la Superintendencia de Servicios donde los usuarios lleguen a reclamar y sean atendidos con sus quejas resueltas', dijo el ejecutivo del Distrito.

Keidys Diaz Plata indicó que está muy complacida por la receptividad de la administración que acogió la propuesta y mostró una disposición que no habían observado en otras capitales costeñas a las que han llegado.