Con tranquilidad se tomaron los familiares de los reclusos en la cárcel de Riohacha, la medida adoptada por la administración departamental de no permitir las visitas como prevención ante la pandemia del coronavirus.
En la puerta del penal este domingo había algunos familiares, a quienes les informaron de la decisión, pero les dejaron entregar lo que llevaban para los detenidos.
'Sabemos que es para evitar contagios del coronavirus, pero nos dejaron entrar la comida que les traíamos', afirmó una joven que llegaba a visitar a su compañero.
Esta decisión la tomó el gobernador de La Guajira, Nemesio Roys Garzón, atendiendo lo ordenado por el Ministerio de Salud que extremó las medidas en los centros de reclusión para hacerle frente a la enfermedad, que ya registra 34 contagiados en todo el país.
La cárcel de Riohacha actualmente es una de las más hacinadas del país con 450 internos, cuya capacidad es para solo 110 personas.
Ante el anuncio del Presidente de la suspensión de visitas a las 132 cárceles del país, la Unión de Trabajadores Penitenciarios (UTP), a través de un comunicado pidió que se decrete la emergencia carcelaria y se evite la propagación de la pandemia.
Esto porque dicen que no se cuenta con los recursos humanos, técnicos y tecnológicos para contrarrestar la posible presencia de este brote al interior de las cárceles nacionales, además del hacinamiento.
