Compartir:

Tres generales en retiro de la Policía Nacional, que estuvieron al frente de la Policía Metropolitana de Barranquilla en la última década, participaron este viernes 30 de agosto en un panel de seguridad para contar sus experiencias y dar una visión sobre acciones futuras que podrían tener en cuenta los actuales integrantes de la institución armada, en la lucha contra el delito.

Leer más: “Mi mensaje no fue para la hinchada, solo fue para esa persona irrespetuosa”

El encuentro se dio en el marco del décimo sexto aniversario de la Mebar, cuerpo policial que nació en el año 2008, durante el primer periodo de Alejandro Char como alcalde de la ciudad de Barranquilla, y que tuvo el aval del entonces presidente Álvaro Uribe Vélez bajo la propuesta de la ‘seguridad democrática’.

Para aquella época fue un nuevo concepto de seguridad para la capital del Atlántico y que se extendía a los municipios del área metropolitana: Soledad, Malambo, Galapa y Puerto Colombia. Su operación comenzó con 2.500 hombres y el propio ex general Óscar Naranjo, director de la Policía Nacional para ese momento, fue quien anunció la entrada en servicio del equipo policial.

El objetivo de la Mebar, bajo la batuta de su primer comandante, el general Óscar Gamboa Argüello, fue concentrar en Barranquilla y en su área metropolitana un grupo de uniformados, hombres y mujeres, especializados en la lucha contra el delito en zonas urbanas.

El conversatorio, realizado en el cubo de cristal de la Plaza de la Paz, estuvo moderado por la directora de EL HERALDO, Érika Fontalvo, y contó con la participación del general en retiro Ramiro Castrillón Lara; general en retiro Gonzalo Londoño Portela, y el general en retiro Mariano Botero Coy. Todos ellos estuvieron acompañados por el general Herbert Benavidez Valderrama, actual comandante de la Mebar.

De interés: Estos son los cortes de luz para este sábado en Barranquilla

Sobre su experiencia en la comandancia local entre los años 2014-2015, Ramiro Castrillón Lara se refirió al fortalecimiento del modelo de detención transitoria llamado UPJ, hoy conocido como Unidad de Servicios Especializados en Convivencia Ciudadana y Justicia (UCJ), de la Oficina de Seguridad y Convivencia Ciudadana del Distrito, con la que buscó reducir la afectación al ciudadano.

“Recuerdo mucho el trabajo en equipo, porque la seguridad no sólo es responsabilidad de la Policía, si no trabajamos en equipo vamos a seguir perdiendo y van a ganar los que siempre buscan afectar al ciudadano. Ese trabajo en equipo que hicimos en aquella época dio inicio a la UPJ donde recogíamos a aquellos que de noche deambulaban buscando la oportunidad para atracar, para encontrar una puerta abierta y meterse y sacar electrodomésticos, eso lo llevamos allá en una forma preventiva. La idea era detener a aquellos que buscaban la oportunidad para afectar al ciudadano no lo siguieran haciendo porque nosotros preventivamente, óiganlo bien, educamos, prevenimos, controlamos”, expresó Castrillón.

El oficial en retiro también lanzó la frase: “Duro con los problemas, suave con las personas”, en la que llamó la atención del general Benavidez y le recomendó ver de “cada problema una oportunidad”.

No le huya a los problemas. Donde hay un problema es donde tenemos que estar, porque si no acudimos a ese problema, otros aprovechan y sacan pecho. Y los que tenemos que sacar pecho somos nosotros, no haciendo las cosas mal, sino dando ejemplo”, especificó.

Ver también: “Estoy vacío, desolado”: Petro revela que su hija Antonella se va de Colombia

Finalmente, insistió en que era “fundamental” trabajar en equipo y de manera transversal con la Fiscalía para combatir la delincuencia. “La rotación de fiscales y la falta de cumplimiento de las normas pueden debilitar el trabajo policial. Es necesario que todas las instituciones cumplan con su labor correctamente para combatir la delincuencia de manera efectiva”.

A su turno, el general Gonzalo Londoño, jefe de la Mebar entre 2015 y 2016, recordó que uno de los fenómenos que le tocó enfrentar y que visibilizó fue el robo de tierras en Barranquilla y su área metropolitana.

“En efecto, a veces los fenómenos delincuenciales realmente mutan, pero siguen estando allí. El tema de rentas criminales, no solamente es en el tráfico ilegal de estupefacientes, sino también se mantiene vigente en el tema de tierras. Y, por supuesto, que esas estructuras se preparan como nosotros, y la labor de ellos es no dejarse sorprender y la nuestra es contenerlos. Hay organizaciones delincuenciales que cuentan con el apoyo de abogados, logran cooptar a algunas autoridades, inspectores y notarios, incluso… el tema de tierras es un botín, es un filete que todo el mundo quiere echarle mano, pero la Policía está allí para acompañar a la ley, visibilizar, hacer investigación, realizar, con el apoyo y liderazgo de la Fiscalía, la investigación criminal”.

Le sugerimos: El mensaje de Javier Acosta horas antes de la eutanasia: “Disfruten”

A los actuales uniformados de la institución armada, Londoño Portela recomendó “actuar de manera rápida ante un problema”.

“No hay que esperar que la solución le llegue en parapente o desde el nivel central, hay que gestionarlo”, anotó.

Por su parte, el general en retiro Mariano Botero Coy, uno de los oficiales que ha estado más tiempo al frente de la Mebar, recordó un enfrentamiento de los problemas y de neutralizarlos de manera efectiva con “trabajo estratégico”.

“Hay que hacer trabajo con la comunidad, para no perderle rastro a estas organizaciones que hoy quieren asentarse y que nos están afectando con la integridad de los ciudadanos como es la vida. Comenzamos por convivencia, comenzamos por generar confianza a la ciudadanía, comenzamos porque el ciudadano se acerque al policía y, a partir de ahí, estamos edificando convivencia, cuando hay convivencia y confianza y cuando hay confianza, no hay capacidad y no hay cabida para el delito y, mucho menos, para el crimen organizado como lo pretenden estas organizaciones”, planteó Botero.

Recordó que la semana anterior, en medio de un encuentro de regiones, autoridades se centraron en las cinco líneas criminales que están afectando a la ciudadanía del Caribe: el crimen organizado en disputa territorial con las bandas locales; las rentas criminales como la extorsión; narcotráfico y microtráfico; el lavado de dinero y los pagadiarios, y el robo de las tierras.

En ese sentido, Botero Coy, hoy asesor de seguridad del Distrito, habló de un equipo interinstitucional, con apoyo de la Fiscalía y el aporte desde el nivel central con más fiscales, para “cobijar a la región y detener todos esos flagelos”.