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Dolor y un reclamo para que se haga justicia expresaron los familiares de Álvaro José González, el hombre de 50 años de edad que fue asesinado en horas de la tarde del domingo 25 de febrero en el barrio Ciudad Paraíso de Soledad. 

González, quien era operario de la empresa Postobón, se encontraba en la terraza de su vivienda en la calle 57 con carrera 1A cuando, al parecer, se opuso a que un sujeto de 25 años agrediera al perro de su propiedad, que, supuestamente, había intentado morderlo. Por este motivo los dos hombres se trenzaron en una riña que derivó en un ataque con cuchillo que dejó como víctima fatal a González Vides, quien recibió al menos 30 puñalas de su agresor. 

Ante este hecho,  Merys Díaz, esposa de la víctima, relató cómo fue ese angustiante momento y exclamó que se haga justicia. Señaló que todo ocurrió porque el perro de la casa salió a ladrarle al señalado agresor: 'Yo salí para donde mi sobrina y lo dejé (a Álvaro) sentado en la puerta de la casa. Venía el tipo (agresor) todo trabado (drogado) y pasó y la perrita le salió. Entonces cuando le salió la perra, mi sobrino la espantó para que se entrara y el sujeto siguió a mi sobrino, pero mi marido llevó a mi sobrino al patio. Después cuando regresó ahí fue cuando lo atacaron (...) luego cuando vengo encuentro que le están dando puñaladas', contó. 

La esposa de la víctima señaló que intentó agredir al sujeto para poder defender a su esposo, quien alcanzó a correr, pero fue alcanzado nuevamente por el agresor quien siguió atacándolo con el arma blanca. 

'Pedimos que no lo suelten (al agresor), que pague y que no salga de la cárcel nunca, nunca. Que se haga justicia', exclamó. 

Sobre la persona que acabó con la vida de su esposo, Merys Díaz dijo que ya había atacado a otros habitantes del barrio en medio de actos de intolerancia. 'Ya él había tenido muchos problemas en el barrio, había macheteado a una persona y le quitó un dedo a otra. Tiene azotado al barrio porque no es la primera vez que se mete con la gente', afirmó. 

De acuerdo con la Policía Metropolitana detalló en un informe que el hombre recibió al menos 30 puñaladas de su agresor: 19 heridas en el pecho, cinco en el abdomen, una en la cabeza, dos en el brazo izquierdo y tres más en la espalda.