Cuatro sepelios de las víctimas fatales de la matanza en Las Flores, ocurrida el pasado lunes 12 de septiembre, se llevaron a cabo este miércoles en el cementerio Inmaculada Concepción del barrio Siape. En medio de las honras fúnebres, hubo nuevamente rechazo ante lo acontecido.
El primero de estos fue el de Chelo José. Una multitud acompañó las exequias de Acevedo Villa, uno de los jóvenes que murió en medio del ataque.
El cortejo fúnebre salió desde la vivienda de la víctima, en el mencionado sector, y terminó en dicho camposanto, no sin antes detenerse en la parroquia Santa María del Mar, en donde se realizó una eucaristía por su eterno descanso. Cuna blanca, la salsa inmortalizada por Raphy Leavitt y Orquesta La Selecta, sonó durante todo el recorrido.
El llanto de los asistentes a las exequias se hizo presente mientras otros gritaban: 'Chelo, no merecías morir'. 'Aquí estamos con tus gallos, como te gustaban'.
Pero también el repudio al múltiple homicidio fue evidente. '¡Justicia por tu muerte!', fue la súplica generalizada.
Sumida por el certero golpe que le arrebató a su hijo, Greys Villa, madre de Chelo, expresó: 'Ay mijo lindo, que dolor, me duele el alma'.
La mujer no se separó del ataúd, mientras derramaba sus lágrimas y escuchaba las canciones que sonaban por un grupo de mariachis.
La última vez que el estudiante de mecánica diesel vio a su mamá fue en la noche del domingo, cuando salió en compañía de la novia con quien iría a comprar comida en la calle 106 con carrera 80, justamente donde cometieron la acción criminal.