'Colombia es un país enfermo', aseguró el procurador General de la Nación, Fernando Carrillo Flórez, en su reciente visita a Barranquilla. Este hablaba en relación con los 10.328 casos de violencia contra la mujer denunciados en todo el país, solamente en el primer semestre de 2018. 'Algo así como 57 casos diarios denunciados', agregó.
La intervención de Carrillo se dio en el marco del lanzamiento de una estrategia preventiva llamada ‘#Carnaval sin abuso’, con la cual se busca proteger de la violencia sexual a los menores de edad y a las mujeres del Atlántico.
Precisamente en ese acto que se llevó a cabo el jueves anterior en el auditorio de la Plaza de la Paz, una de las mujeres que estaba expectante de la intervención del jefe del órgano de control era Laura*, la madre de la menor de 14 años que entre la noche del pasado 9 de enero y la madrugada del día 10 fue víctima de una violación múltiple en el barrio Los Ángeles, en la localidad Suroccidente de Barranquilla.
Laura caminó entre funcionarios, líderes, asistentes y una nube de periodistas que aguardaban por las declaraciones de Carrillo. Su misión no era hablar con el procurador, ella iba tras Emma Doris López, la defensora de los derechos de la mujer e integrante del Comité Nacional de Protección a la Mujer.
'Me vine a encontrar con ella para iniciar el acompañamiento de mi niña. Y para que me asesorara en el proceso porque todavía no han capturado a los otros que participaron del abuso', manifestó Laura.