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Llanto y dolor se registra la mañana de este viernes en las instalaciones del Instituto de Medicina Legal de Barranquilla donde se cumplió el homenaje a la estudiante del SENA asesinada, Gabriela Romero.

Antes de los actos, Luz Divina Cabarcas, la mamá de la jovencita de 18 años, se negaba a entrar por la tristeza que la embarga desde que su hija desapareció y luego apareció asesinada en zona rural del municipio de Malambo.