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'Yo perdí tres millones y medio. Pero conozco personas que invirtieron 20, 50 y hasta 100 millones en el negocio'. Así empezó su relato uno de los clientes de Merlin Network, filial de la empresa Magitek, que denunció su caso ante las autoridades el pasado fin de semana una vez estalló el escándalo de las supuestas estafas virtuales.

Roberto* prácticamente tuvo un viacrucis: acudió el sábado anterior por la mañana a la sede del Comando de la Policía Metropolitana de Barranquilla, al mediodía llegó hasta las instalaciones de la Sijín, en la carrera 38, y luego estuvo por la tarde en la sede de la Fiscalía del edificio Nelmar. Ayer domingo se asomó por el Centro de Servicios Judiciales, ubicado en la antigua sede de Telecom, mientras se llevaba a cabo la audiencia contra el administrador de empresas cordobés Fredy Enrique Morelo Morelo, de 37 años, y el quindiano Deison Andrés Valencia Grajales, de 34, empresario de oficio, dos de los capturados por el escándalo de las supuestas estafas virtuales a través de la plataforma Merlim Network.

Justo cuando en la sala siete del complejo judicial eran presentados por la Fiscalía ante un juez de control de garantías los detenidos, este empleado de una empresa de teléfonos celulares permanecía en la puerta a la espera de noticias. Estaba acompañado de otro grupo de personas que, permanentemente, hablaban de 160 denuncias que habían atendido las autoridades durante el sábado, todas contra Magitek y Merlim Network.

'Un mes atrás se habían atrasado los pagos y fueron modificados los contratos. Yo había dejado quieta la cuestión, aunque me alerté el viernes (25 de agosto) como a las 3 o 4 de la tarde cuando había acceso a la página, pero era imposible acceder al juego de Merlim. Después pasaron un mensaje de WhatsApp por un grupo de clientes y estalló la bomba', expresó.

Roberto se refería al mensaje que se difundió el viernes en WhatsApp en el que, supuestamente, ambas firmas anunciaban que 'ya no se iban a entregar los incentivos pactados y que a partir del momento todo les quedaba en cero'. Por esta razón, los clientes decidieron tomarse las instalaciones de Magitek en el barrio Boston.

Vendí mi carro. Johan* dijo haber vendido su carro para 'meterse de lleno' en el negocio virtual. 'Me la pintaron linda unos amigos y decidí invertir para luego meter a otras personas. Con eso alcanzaron a darme unas comisiones en dólares, pero después se estancaron. Ahora quedé en el aire', dijo el joven, estudiante de diseño gráfico.

'Sin nombres'

Ante la solicitud de la identidad de los clientes que dijeron sentirse afectados, estos manifestaron a EL HERALDO 'no te puedo dar mi nombre' porque la empresa Magitek Internacional les hizo llegar un comunicado por correo electrónico en el que advertía de una 'eliminación permanente de cuentas' si se cometían 'acciones no éticas':

'Procederemos a eliminar de manera permanente a los afiliados que hayan difamado, calumniado, desacreditado o promovido información no oficial de Merlim Network, hayan usado emuladores para engañar al sistema de Cash Gamer y que hayan utilizado nuestra imagen o nombre comercial como el uso de logotipo o isotipos con falsos testimonios y quienes están promoviendo nuestra actividad como un sistema de inversión, entre otros. Tenemos afiliados que ya están identificados y serán eliminados permanentemente y de manera irrevocable en el transcurso de la semana y nos reservamos el derecho de tomar acciones legales dependiendo de cada caso'. (*Nombre cambiado a petición de las fuentes).