Los atributos físicos de las vendedoras y en especial de la gerente comercial de una sucursal de Global Brokers en Barranquilla, María Mónica Montero Mantilla, fue una de las estrategias de los directivos de la empresa para cometer las presuntas estafas con la oferta de supuestos bienes en remate.
Así lo ha dado a conocer en audiencias el fiscal 36 de la Unidad de Patrimonio Económico, Francisco Cuesta Manyoma, en las que ha leído testimonios de víctimas que se refirieron a la 'buena atención por parte de agraciadas jóvenes', en especial hacia clientes hombres.
En la diligencia del miércoles, en la que pidió medidas de aseguramiento contra Montero, dos mujeres y un hombre que se entregaron el martes en la URI, el fiscal dijo lo siguiente de la exgerente nacida hace 26 años en Cartagena y quien está embarazada:
'Para convencer a las personas, María Mónica no solo se valía del encanto de la mujer cartagenera, sino que las víctimas la describen como dulce, amable y espectacular en su atención'. Al escucharlo, Montero sonrió y miró a un hombre sentado en una de las sillas del público.
La 'amable atención' de Montero, consta en testimonios de afectados por Global Brokers, llegaba hasta que estos pagaban la última cuota de dinero que se les pedía para los negocios. Los cuales, en palabras del fiscal, eran 'una fantasía'.
'Se volvían evasivas, no contestaban el celular o eran cortantes', mencionó Cuesta Manyoma.
'Me endulzaron'
Una víctima de Global Brokers fue Rafael Sierra Estrada, quien asegura que en 2013 le entregó $32 millones a Montero Mantilla por una casa en el barrio Las Nieves, suroriente de Barranquilla.
Sierra declaró que, al llegar a una de las oficinas de Global Brokers, fue atendido por una vendedora de nombre Ligia, quien le prometió el negocio de su vida.
'Me encerraron en la oficina de María Mónica y ahí me empezaron a endulzar y endulzar; caí porque no solo le hablaban a uno con una dulzura, sino de una forma muy cariñosa', recordó.
La vendedora también le manifestó que necesitaba hacer esa venta porque estaba 'descuadrada', y de lo contrario le iba a salir mal el pago a fin de mes.
'Fui tan incauto que salí esa tarde de ahí para Riohacha y regresé en la noche con los 32 millones de pesos en el bolsillo', relató. 'María Mónica me dijo que iba a salir bien de allí, pero salí fue bien enterrado'.
Hasta la fecha, el banco al que Sierra hizo el préstamo le descuenta cada mes más de $1 millón por nómina. Solo en Atlántico, la Fiscalía ha recepcionado más de 390 denuncias por estafas contra Global Brokers.
Montero se entregó al mediodía del martes en la URI. En la mañana lo habían hecho Gina Martínez Maestre, Lourdes Torres Martínez y Carlos Leal Chávez. Y, entre finales de julio y la primera semana de este mes, habían sido capturadas siete personas y otras dos también se habían entregado.
