Como Toto Sánchez Rincón, de unos 60 años, de cabello corto, tez clara y con aspecto de ser del interior del país, la Policía tiene identificado al sospechoso de haber raptado a la niña Andrea Carolina Rojas Erazo, de 7 años, en zona rural de Valledupar.
La menor de edad desapareció la tarde del sábado pasado en la finca Villa Miriam, situada en la vereda Los Cominos de Tamacal, donde trabajaba el sospechoso y también reside la víctima. La niña y dos de sus tres hermanos, de dos y cuatro años, salieron con el hombre hacia una tienda cercana luego de que este le dijera a la mamá, Gregoria María Erazo Morales, que iba a comprarles galletas.
Los hermanos de Andrea regresaron solos a la finca. Le contaron a su mamá -quien también trabaja en la finca-, que la niña se había quedado con Toto Sánchez recogiendo leña. Sin embargo, hasta el momento no han aparecido ninguno de los dos.
La Policía, que conoció el caso en horas de la noche, comenzó un trabajo de campo para establecer la veracidad de esta denuncia y ubicar a la menor de edad. 'Determinamos que la niña efectivamente fue raptada', informó el subcomandante de la Policía del Cesar, coronel Édgar Rodríguez.
Personal del Gaula, de Carabineros y de vigilancia de la Policía están al frente de la labor de la búsqueda. 'Además -añadió el oficial- estamos haciendo sobrevuelos desde este lunes festivo con el fin de distribuir volantes, para dar a conocer esta situación y que la gente denuncie dónde se encuentra esta persona'.
La madre de la niña habló con los medios de comunicación y contó que quien se llevó a su hija llegó a la vereda en abril pasado pidiendo trabajo en las fincas de la zona. Según ella, nunca tuvo actitudes extrañas, por el contrario 'trataba bien a mis hijos, era trabajador'. Igual agregó que ese día después de llevar a los niños a la tienda 'les dijo a los dos más pequeños que se fueran a la casa porque él regresaría después con Andrea'.
Erazo apuntó que espera que Andrea vuelva sana y salva, 'que no vaya a aparecer muerta'.
Recompensa
La Policía está ofreciendo una recompensa de hasta 50 millones de pesos por información que ayude a rescatar a la menor, y a la captura del señalado de raptar a la niña. El subcomandante también indicó que el hombre se presentó también como pastor cristiano, de acuerdo con el testimonio de vecinos de la finca, y 'poco a poco se fue ganando la confianza de la gente'.