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Uniformados de la Policía Metropolitana de Barranquilla, adscritos a la unidad de Infancia y Adolescencia, aprehendieron a la menor de edad que la tarde del martes se llevó en un supuesto caso de abuso de confianza a un bebé de un mes de nacido, hijo de una amiga.

La detención de la adolescente se llevó a cabo ayer, en el momento en que se dirigía a la vivienda del pequeño, situada en el barrio El Porvenir de Soledad. Los uniformados sorprendieron a la adolescente con el bebé en sus brazos, arropado con la misma sábana con la que lo había sacado de su casa.

Luego, la joven fue trasladada hacia la Unidad de Reacción Inmediata, URI, de Soledad.

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La adolescente aprehendida por la Policía.

De acuerdo con información suministrada por la Policía de Infancia, la joven negó el rapto del niño, y a cambio manifestó que se lo llevó el martes a la 1:30 de la tarde, luego de que su amiga se lo entregara para 'darle un paseo y comprarle unas cosas'. Ayer, a eso de las 9:30 de la mañana, dijo la joven que 'iba a entregar al niño a sus padres porque ya había durado mucho tiempo con él'.

'Lo que la adolescente informa es que se llevó al bebé para comprarle unos paños y una ropa. Luego de esto se enfermó y no pudo regresar al niño a su hogar. Que se le hizo tarde y que decidió llevárselo para donde una tía', mencionó ayer la teniente Yeimy Vargas, jefe de la Unidad de Infancia y Adolescencia.

Pese al relato de la adolescente, en el que siempre trató de demostrar que todo fue un malentendido, la Policía la llevó al Centro de Servicios Judiciales para Adolescentes, Cespa, para su judicialización por el delito de secuestro simple.

Angustia en la familia. Antes del retorno del niño al seno de su hogar, sus padres y demás familiares, en compañía de la Policía, habían desplegado una búsqueda por todo el barrio El Porvenir, incluso en vías que interconectan al municipio atlanticense con otros sectores. Llegaron al Puente Pumarejo y a la Terminal de Transportes, pues por rumores de otras personas del barrio creían que el niño iba a ser sacado en un bus interdepartamental hacia el interior del país. Todo este operativo y la angustia familiar finalizó con la aparición del bebé.

Por otro lado, la Seccional Atlántico del Instituto de Bienestar Familiar ordenó una investigación a fondo sobre el caso, pues evidenciaron que el pequeño no estaba registrado ni su hermana gemela tampoco.

Voceros del Instituto también informaron que el niño retornaba a su hogar, pero bajo un estricto seguimiento nutricional y sicosocial.