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Los votantes latinos en EE.UU. han sido decisivos en varios estados clave en las elecciones de este año, pero de manera opuesta: el presidente saliente, Donald Trump, consiguió vencer en Florida gracias al apoyo de los cubanos, mientras que el mandatario electo, Joe Biden, triunfó en Arizona y estuvo a punto de sorprender en Texas por el respaldo de los hispanos, menos en las zonas fronterizas.

Esto ocurre porque las inclinaciones políticas de los hispanos en el país varían según el género, la generación, el país de origen -desde Chile hasta México, pasando por Nicaragua-, la religión y el tiempo que llevan en Estados Unidos, de acuerdo a varios estudios demográficos.

Lo que sí es común en este grupo tan heterogéneo es que se trata del grupo étnico más joven del país y, según los primeros análisis, hubo una participación particularmente fuerte entre los latinos menores de 30 años.

La tendencia del conjunto del sufragio latino volvió a ser demócrata, ya que Trump no ganó la mayoría de este voto en ningún estado, aunque estuvo cerca de hacerlo en Florida, donde hubo empate técnico entre ambos candidatos gracias al impulso de los cubanos, de acuerdo a un estudio del America's Society Council of America.

Los cubanos de Florida, con Trump

De hecho, Trump recibió el apoyo del 56 % de los cubano-estadounidenses, un grupo con mucho peso en el condado de Miami-Dade, que terminó decantando la balanza de los 29 votos electorales para el republicano.

El miedo a un supuesto 'comunismo' de Biden, una idea aupada y potenciada por la campaña del político conservador, y la mano fuerte de Trump hacia la isla provocaron que la gran mayoría de ese grupo electoral eligiera al presidente saliente en las urnas.

Tras conocer los resultados, unos 200 cubanos salieron este sábado a las calles de Miami para protestar por un presunto 'fraude' electoral y aseguraron que Biden tendrá que enfrentar una batalla legal sobre los comicios, una estrategia planteada por el propio Trump.

El voto joven de Arizona es demócrata

Arizona, un estado muy conservador en el que solo dos candidatos presidenciales demócratas habían ganado en los últimos 70 años, cambió de signo y dio la victoria a Biden, a falta del conteo de menos de 100.000 votos.

Y buena parte de la responsabilidad de este resultado lo tiene la alta participación de jóvenes hispanos que utilizaron su voto como rechazo a las políticas migratorias de Trump.

Según datos preliminares de la firma Latino Decisions, cerca del 70 % de la población hispana respaldó al candidato liberal, especialmente por la movilización de organizaciones latinas como Mi Gente y ¡Aquí se Vota!.

Además del sufragio contra Trump, varios analistas han señalado la importancia que ha tenido en Arizona la repulsa de los latinos contra el exalguacil del condado de Maricopa, Joe Arpaio, por promulgar una de las leyes más antinmigrantes del país y a quien el mandatario le otorgó un perdón presidencial.

Otro factor, según expertos consultados por Efe, ha sido el impacto que tuvieron los insultos de Trump al fallecido senador John McCain, una figura muy respetada en ese estado y en EE.UU.

Eso opina Ray Ibarra Maldonado, un abogado afincado en Phoenix y experto en inmigración que trabajó codo con codo con la oficina del senador en 'muchos' de sus casos.

'Hay muchos votantes independientes y republicanos latinos que querían mucho a John McCain. El rifirrafe de Trump le ha pasado mucha factura, no solo aquí, sino también en todo el país', reflexionó el letrado en declaraciones a Efe.

Texas, un 'casi pero no'

El otro estado en el que los hispanos tuvieron un peso importante, sin olvidar Nevada, fue Texas. Biden fue el aspirante demócrata que estuvo más cerca de vencer ahí en las últimas décadas.

En las grandes ciudades, como Houston, Dallas, San Antonio y Austin, el votante latino tendió a votar por el presidente electo. Uno de los grupos que trabajó para ello fue Jolt Texas. Según su presidente, Antonio Arellano, la organización animó a medio millón de latinos a que votaran por primera vez y ayudaron a que la participación joven hispana creciera un 600 %.

Sin embargo, Trump se impuso entre los latinos que viven en varios condados limítrofes con México, una sorpresa para el Partido Demócrata, que dio ese apoyo por hecho y no se esforzó en hacer campaña ahí.