El Gobierno de Nicolás Maduro y la oposición venezolana que lidera Juan Guaidó firmaron un acuerdo con el que prevén que la Organización Panamericana de la Salud (OPS) gestione dinero y otras ayudas para la atención de la pandemia por la COVID-19 en el país, informaron este martes las partes involucradas.
El ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, anunció el acuerdo como una 'buena noticia', sin dejar de subrayar reiteradamente que se trata de un acercamiento entre el Ejecutivo de Maduro y 'un sector' del antichavismo, aunque el firmante del lado opositor es Julio Castro, designado por Guaidó como asesor sanitario del Parlamento.
'Ambas partes proponen trabajar coordinadamente con el apoyo de la OPS en la búsqueda de recursos financieros que contribuyan al fortalecimiento de las capacidades de respuesta del país para atender la emergencia sanitaria causada por la pandemia', reza el escrito, leído por Rodríguez.
Diatriba parlamentaria
Aunque la mayoría de diputados de Venezuela respaldan a Guaidó como presidente de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento) el Gobierno y el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) reconocen al disidente opositor Luis Parra como líder de la Cámara.
Ahora, el documento firmado muestra un aparente reconocimiento del chavismo a la legitimidad de la AN que lidera Guaidó -reconocido como presidente interino de Venezuela por casi 60 países-, al incluir la firma de Castro como asesor del Parlamento.
Sin embargo, Rodríguez insistió en que el médico representa a los cuatro partidos más importantes de la oposición y, dijo, 'se denominó' asesor del Legislativo.
La versión opositora
Antes, en un comunicado, el llamado Gobierno interino que preside Guaidó había informado que este acuerdo, firmado el lunes, permitirá a la OPS 'recibir y ejecutar ayuda humanitaria frente a la COVID-19 en Venezuela'.
'Tras varios meses de lucha, hemos conseguido que la OPS pueda recibir los fondos aprobados para ayuda humanitaria', dice el texto del antichavismo en el que se explica que esa ayuda consistirá en equipos de protección para el personal sanitario, mejorar la capacidad de diagnóstico y la atención de pacientes.
Además, el equipo de Guaidó indica que el dinero destinado para estos asuntos proviene de algunas de las cuentas estatales que Venezuela tiene en el exterior, cuyo manejo fue arrebatado al Gobierno de Maduro, al que países como Estados Unidos consideran ilegítimo