Las muertes por COVID-19 en todo el mundo ascendieron este martes a 344.454, de acuerdo con los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que elevó el número global de casos a 5,37 millones, con un 80 % de las infecciones concentradas en Europa y América.
El número de contagios diarios se mantiene desde la pasada semana en cifras récord de más de 100.000 casos, mientras que los decesos se han estabilizado en torno a 4.000 por jornada, unas cifras inferiores a las de abril.
América es la región más afectada con 2,45 millones de contagios, seguida de Europa con 2,02 millones (aunque con gráfica descendente de infecciones diarias) y Oriente Medio con 427.000.
Tanto en el continente americano como en Próximo Oriente la curva de infecciones sigue en ascenso, así como en el sur y sureste de Asia (con 203.000 casos) y en África (83.000).
EEUU y Brasil se sitúan como los países más afectados del mundo en número de contagios, seguidos de Rusia, Reino Unido y España, siendo ya 12 los países donde se ha superado la barrera de las 100.000 infecciones.
Los datos de las redes sanitarias nacionales indican que 2,4 millones de afectados por COVID-19, un 42 % del total, ya se han recuperado, mientras que un 2 % de los pacientes activos, unos 53.000, se encuentran en estado grave o crítico.