Compartir:

Cinco personas murieron, 18 resultaron heridas y varias quedaron bloqueadas tras la inesperada erupción de un volcán el lunes en una turística isla de Nueva Zelanda.

Según la policía, una cincuentena de personas visitaban White Island cuando se produjo la explosión, que lanzó una gran cantidad de ceniza y piedras al aire.

Los fallecidos 'son cinco de aquellos que fueron rescatados de la isla más temprano', dijo el subjefe de la policía John Tims a la prensa.

Tims agregó que 18 personas eran atendidas por heridas, incluyendo algunos con quemaduras graves, y que no ha habido contacto con otro grupo de al menos 10 personas que permanecía en la isla tras la erupción.

'No sabemos seguro el número exacto de ellos, y tampoco estamos seguro de su estado', dijo Tims.

White Island se encuentra a unos 50 km de la costa de la turística bahía de Plenty en la isla norte de Nueva Zelanda, y los viajeros aficionados al turismo de aventuras suelen visitarla, ataviados con cascos de seguridad y mascarillas de gas, para acercarse al volcán.

La erupción tuvo lugar a las 14H11 (01H11 GMT), lanzando al aire una espesa columna de ceniza de 3,6 km.

Al caer la noche, la actividad volcánica hace que los intentos de rescate sean demasiado peligrosos, advirtió Tims.

'La isla es inestable, hay riesgo de futuras erupciones, físicamente es peligroso para nosotros volver a la isla'.

'Tengo que tener en cuenta la seguridad de nuestra gente y de los equipos de rescate', agregó.

Unas imágenes retransmitidas en directo del volcán mostraban a más de media decena de personas caminando por el borde del cráter antes de la erupción. Luego se cortaron las imágenes.

Muchos turistas 'estaban en o en torno a la isla, se perdió el rastro de algunas de ellas', declaró a la prensa en Wellington la primera ministra, Jacinda Ardern.

'Es una situación que evoluciona y, por supuesto, todos nuestros pensamientos están con las personas afectadas', agregó.

Según ella, algunos de los turistas serían extranjeros.

Espesa humareda blanca

White Island es el volcán con más actividad del archipiélago neozelandés, según la agencia gubernamental GeoNet.

Alrededor de 10.000 turistas lo visitan cada año. Ha registrado erupciones frecuentes en los últimos 50 años, la última, en 2016. Este año, se trasladó un contenedor de 2,4 toneladas hasta la isla, en avión, para que fuera usado como refugio en caso de erupción.

La Agencia Nacional de Gestión de Situaciones de Emergencia declaró que la erupción volcánica era 'moderada'. Una espesa humareda blanca se podía ver desde varios kilómetros a la redonda.

Los supervivientes fueron trasladados desde la isla a tierra firme en barcos de excursión, mientras varios helicópteros y aviones sobrevolaban la región.

Cuatro turistas y un piloto que habían visitado la isla en helicóptero fueron encontrados. Habían aterrizado en la isla poco antes de la erupción, según la compañía Volcanic Air.

'No sabemos lo que sucedió después, pero sabemos que los cinco regresaron a Whakatane (ciudad situada a unos 50 km de la isla volcánica) en uno de los barcos turísticos', declaró un portavoz de la compañía a la AFP.

Michael Schade, un turista que pudo salir justo a tiempo, grabó unas imágenes de la tragedia.

Sus videos muestran a grupos de turistas asustados agrupados en la costa, esperando ser evacuados, mientras el suelo a su alrededor arde, y el cielo está recubierto de humo. Muy cerca de ellos, se ve un helicóptero dañado recubierto de ceniza.

Mientras su barco iba alejándose, el volcán iba desapareciendo tras una gruesa humareda blanca.