Compartir:

El presidente peruano, Martín Vizcarra, buscaba nuevos ministros para reorganizar su gabinete después de disolver el Congreso, fortalecido por la renuncia de su vicepresidenta y rival Mercedes Aráoz, aunque esta dimisión es inválida para el gobierno.

Al frente del nuevo gabinete de 19 miembros Vizcarra designó a Vicente Zevallos, exministro de Justicia, quien afirmó que desde el punto de vista constitucional la renuncia de Aráoz 'no existe', por lo que ella sigue siendo la vicepresidenta (si bien no la 'presidenta encargada'designada por un Congreso disuelto).

'[Aráoz renunció] ante el presidente del Congreso (Pedro Olaechea) y el Congreso no existe, ha quedado disuelto', declaró Zevallos, quien reemplazó como jefe de gabinete a Salvador del Solar.

Todos los ministros debieron renunciar el lunes luego que el Congreso negara un voto de confianza al gobierno ligado a una reforma en el Tribunal Constitucional. Tras la negativa, Vizcarra cerró el Legislativo, controlado por la oposición, y convocó elecciones para renovarlo.

La declaración del primer ministro abre interrogantes sobre cómo será la cohabitación entre Vizcarra y Aráoz, quienes están distanciados, pues ella lo debería sustituir en caso de incapacidad o cuando el presidente viaja al exterior. Aráoz no ha reaccionado a las palabras del primer ministro.

Zevallos mantuvo reuniones con posibles candidatos a ocupar cargos, pero se ha negado a revelar sus nombres. Sólo dijo que el nuevo gabinete será anunciado el jueves, aunque es probable que Vizcarra confirme en sus cargos a varios de sus anteriores ministros. 'Hoy se hará público, estamos en plena evaluación', declaró a la radio RPP.

Decisión cuestionable

Más allá del ámbito político, la crisis no se ha traducido en caos ni tensiones y todas las actividades se desarrollan normalmente. 

'La crisis política y el choque institucional en Perú se venían gestando desde hace tiempo. Aunque la decisión de Vizcarra fue cuestionable, probablemente tenía pocas opciones', dijo Michael Shifter, presidente del centro de estudios Diálogo Interamericano.  

'Era que el Congreso intentara sacarlo por los tribunales o que él se moviera primero y disolviera el Congreso', sintetizó.

En un país con instituciones débiles, el horizonte seguirá siendo conflictivo, estima el analista, al menos hasta las elecciones de enero.

¿Nuevo presidente encargado?

Aunque el Congreso quedó disuelto, sigue en funciones su Comisión Permanente, de 27 miembros, entre ellos 18 fujimoristas. La Comisión, sin embargo, tiene facultades restringidas.

La Constitución la faculta para ratificar la designación de algunos funcionarios y aprobar créditos, pero no para tratar reformas constitucionales ni cursar mociones contra el gobierno.

Después de ser cesado, el Congreso aprobó suspender a Vizcarra y nombró a la vicepresidenta Aráoz como 'presidenta encargada', quien fue juramentada de inmediato por Olaechea. Sin embargo, al día siguiente ella renunció a ambas responsabilidades.

Olaechea abrió la sesión de la Comisión este miércoles en medio de rumores de que los opositores podrían intentar designar a un nuevo 'presidente encargado'. AFP