Migrantes cubanos esperan este sábado tener noticias de sus familiares en la estación migratoria de Tapachula, en el sur de México, donde medio millar de compatriotas protagonizaron un motín y una fuga masiva el pasado jueves.
'Todo he intentado y nadie me atiende, ‘solo espere’, me dicen. Eso es otro proceso y todo es proceso y proceso y no nos solucionan nada', dijo a la AFP Wilfrido Piñero, cubano de 41 años.
Piñero fue parte de los 545 migrantes que escaparon del establecimiento hace dos días. Luego intentó volver por su esposa pero ya no pudo ingresar.
Desde entonces aguarda afuera de la estación por noticias de su pareja, esperando que no haya sido deportada.
'Llevo tres días durmiendo en el banco ese', dice con la voz entrecortada y envuelto en el humo de cigarrillos que fuma constantemente.
Piñero y su esposa fueron detenidos por agentes migratorios el martes pasado cuando se hospedaban en un hotel de Tapachula y posteriormente trasladados a la estación migratoria.
Como muchos cubanos, ambos tramitaron un recurso de amparo ante jueces mexicanos que impide que sean detenidos y deportados, pero los agentes no lo reconocen.
'Dicen que el papel que nos dan no es válido, que no nos sirve, a muchos se lo rompen', explica.
El Instituto Nacional de Migración (INM) dijo el viernes que los abogados que tramitan los amparos promueven 'falsas expectativas' de poder circular libremente por territorio mexicano, sin precisar cual es el alcance legal del documento.
José Verdugo, activista en favor de los migrantes, denuncia que las autoridades migratorias no respetan la sentencia de los jueces.
'Realizan la detención y la deportación a sabiendas de la existencia de ese amparo', explica.
Laisen Gómez también espera noticias de su esposa detenida. 'Mi esposa tiene un amparo donde dice libre tránsito, no deportación y no detención', reclama.
Gómez, de 32 años, es cubano pero ya tiene nacionalidad estadounidense. Su esposa emigró de Cuba para reunirse con él pero fue deportada.
Cerca de donde Gómez habla salen camiones con migrantes que serán deportados y unos metros más allá haitianos esperan que las autoridades les otorguen una visa.
El INM informó que este sábado 104 hondureños fueron deportados a su país.
La gran mayoría quieren llegar a Estados Unidos pues alegan que la violencia y la pobreza hacen imposible la vida en sus países de origen.
Pero el presidente estadounidense, Donald Trump, considera este éxodo una amenaza nacional y ha presionado a México para que contenga la migración.