Un juez federal de EEUU bloqueó ayer temporalmente el nuevo veto migratorio del presidente, Donald Trump, horas antes de su entrada en vigor prevista para la medianoche de hoy.
La orden del magistrado, Derrick K. Watson, con sede en Honolulu (Hawái), deja por el momento sin efecto la medida con la que Trump pretendía suspender la entrada al país de inmigrantes de seis países de mayoría musulmana y de todos los refugiados.
La decisión de Watson supone un segundo revés legal para el Gobierno de Trump, que ya vio cómo la Justicia bloqueaba a principios de febrero su primer veto.
Tras una breve pero infructuosa batalla legal, Trump presentó el 6 de marzo una versión revisada del veto, en la que introdujo algunos cambios rebajando el tono de la medida. El nuevo veto migratorio suspendía durante 120 días el programa de acogida a refugiados y durante 90 la entrada de ciudadanos procedentes de Irán, Somalia, Sudán, Siria, Yemen y Libia.
Sin embargo, Watson optó por volverla a bloquear a instancias de una demanda interpuesta por el fiscal general del estado de Hawái, el demócrata Doug Chin, quien alegó que el nuevo veto es, como el primero, inconstitucional.
Trump responde
En respuesta a la decisión judicial, Trump alertó que llevará esa batalla legal hasta el Tribunal Supremo y que saldrá victorioso. '(...)Vamos a ganar y vamos a mantener seguros a nuestro país y a nuestros ciudadanos', dijo durante un mitin en Nashville (Tennessee), y calificó el fallo como 'un exceso judicial sin precedentes', y reiteró que la Constitución le otorga poderes para suspender la inmigración en pro de la seguridad nacional.