WASHINGTON (AP) — Alimentos y otras mercaderías volaban de las tiendas, los obispos excusaban a los fieles de la misa dominical y la capital de Estados Unidos se aprestaba a recibir una megatormenta de nieve que abarcará buena parte del noreste del país durante el fin de semana.
Las condiciones se volvieron peligrosas al caer los primeros copos desde Tennessee hasta los montes Blue Ridge de Virginia, rumbo a Washington. Había autos detenidos en las rutas y cortes de electricidad hasta el estado de Georgia.
Los meteorólogos parecen haber acertado en sus pronósticos, que convergen todos en que la capital y zonas aledañas sufrirán lo peor de la tormenta. El Servicio Meteorológico Nacional dijo que podría ser una de las tres tormentas más graves de la historia en Washington.
La caída de nieve de 2,5 a 4,5 centímetros por hora podría durar 24 horas o más en algunas zonas, dijo el meteorólogo Paul Kocin, del Servicio Meteorológico Nacional. Eso significa que habrá más de 60 centímetros en Washington, 30 a 40 en Filadelfia y 20 a 30 en Nueva York.
Kocin comparó la tormenta con el "Armagedón de Nieve" ("Snowmageddon"), la primera de dos tormentas que arrasaron Washington en 2010 y dejaron 80 centímetros de nieve en algunos lugares, pero dijo que el hecho de que se produzca en un fin de semana y con tantas advertencias podría reducir las víctimas y daños.
Cancelan 6.600 vuelos
Las líneas aéreas cancelaron 6.600 vuelos programados para el viernes y el sábado desde, hacia y dentro de Estados Unidos a medida que una gigantesca nevada comenzaba a cubrir gran parte del este del país.
De las cancelaciones del viernes, 3.000 fueron en Charlotte y Raleigh, en North Carolina, de acuerdo con el servicio de rastreo de vuelos FlightAware.
Otros 3.600 vuelos fueron cancelados para el sábado, especialmente en las ciudades de Filadelfia, Washington y Nueva York, hacia donde las aerolíneas suspendieron básicamente todos los viajes en avión.
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