El presente de Barranquilla como ciudad de destino para inversiones y negocios está enmarcado en segmentos estratégicos diseñados por las ventajas que ha adquirido el territorio. Si hace 25 años se promovió un Distrito Industrial y Portuario para potencializar la vocación adquirida desde del siglo XIX por la migración europea, ahora la oferta del sector servicios y sus actividades han complementado una dinámica atractiva para que empresas exportadoras elijan a la capital del Atlántico para sus operaciones y alcancen mercados de Norte América, el Caribe y Europa.
Servicios de salud, muebles, servicios logísticos, turismo de eventos y negocios hacen parte de los segmentos que enlazan el tejido empresarial, el cual se ha aprovechado de las inversiones del Estado en infraestructura, de los privados en los puertos y las prerrogativas de las zonas francas y corredores industriales.
Leonardo Bautista, gerente de la Zona Franca Palermo, resalta el impacto generado por las inversiones en los puertos y la entrada de barcos a graneles limpios. 'Tienen el objetivo de hacer en Barranquilla transformaciones de esta materia prima, para posteriormente ser exportada'.
De las oportunidades de inversión gestionadas por ProBarranquilla en 2017, cuyo objetivo es operar en 2019, la oficina destaca una reactivación de proyectos industriales que representan un 40%, especialmente por la participación de negocios para sectores de servicios y comercio desde el 2007. 'Y de esas oportunidades atendidas, el 59% son de origen extranjero', precisan en ProBarranquilla.