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Trabajar un día al mes, o por semana, cómodamente desde la casa; llegar un poco más tarde a la jornada laboral; despacharse de la oficina los viernes al mediodía o que la compañía se haga cargo de los gastos de su vehículo, ya no son 'sueños' de un empleado.

Estos beneficios hacen parte de un listado que ofrecen hoy multinacionales extranjeras en Colombia y algunas grandes compañías locales a sus trabajadores bajo el concepto de salario emocional. Se trata de la oportunidad de brindar a los empleados estímulos, en el que lo laboral esté en equilibrio con lo personal.

De esta manera lo destaca Felipe Delgado, executive Manager de Michael Page, firma de reclutamiento que asegura tener más perfiles específicos ubicados en el mercado colombiano. En entrevista con +NEGOCIOS (+n), Delgado explica que esta forma de 'recompensa no remunerada para el empleado' tuvo su origen en grandes compañías de Estados Unidos, Europa y empezó a ser replicado en firma locales al menos hace 15 años.

'El salario emocional ofrece un bienestar no tangible en dinero para que a cambio se traduzca en motivación, generación de compromiso y un ambiente beneficioso para que cada colaborador tenga un mejor desempeño en su labor diaria', afirma el ejecutivo.

A las empresas, agrega Delgado, no les cuesta darlos (salarios emocionales) y, en cambio, sí pueden tener un beneficio de productividad por parte de los empleados.