Un nuevo ministro de Hacienda llega al poder durante casi tres años del gobierno del presidente Gustavo Petro, para ser exactos el cuarto. Se trata de Germán Ávila Plazas, quien se desempeñaba como presidente del Grupo Bicentenario y ha estado vinculado a temas de vivienda y crédito a lo largo de su carrera. Sin embargo, hay muchas dudas, preocupaciones y también incertidumbre en analistas, expertos y gremios de lo que esto significa para Colombia en el que para muchos es el ministerio más importante de un país.
Y no es para menos, la constante rotación que ha tenido el jefe de Estado con esta cartera (José Antonio Ocampo, Ricardo Bonilla, Diego Guevara y ahora Germán Ávila), que históricamente ha sido la más estable de todas, es de analizar. Y es que solamente en el siglo XXI, en promedio, un ministro de Hacienda ha durado 27 meses. Pero si nos vamos más allá, exactamente hace seis décadas, no se veía una rotación tan alta como la del gobierno de Guillermo León Valencia (1962-1966), en el que hubo cinco ministros de Hacienda en propiedad.
Todo esto es solo un debate de análisis para comenzar lo verdaderamente grueso del problema, y es la crisis fiscal que tiene Colombia. De ahí surgen muchas preguntas, como por ejemplo: ¿será que este es el ministro ideal para enderezar el camino? ¿Será que dirá todo lo que diga el presidente, así sea que técnicamente sea improbable? ¿Podrá el país cumplir la regla fiscal? ¿Se ejecutarán los recortes en el presupuesto para justamente estar a tono con la regla fiscal? ¿Los programas sociales se verán afectados o no?
Todo esto, sumado a otro escollo que es un problema que sigue sin resolverse: la no desginación, de momento, de un director en propiedad del Dane, ni un ministro de Comercio, ni un director de la Dian, ni tampoco un director del Departamento Nacional de Planeación (DNP), en el que varios analistas señalan que este “es un país sin presidente, sin política fiscal y sin rumbo”.

La rotación
Un punto que ha sido crítico en el gobierno de Gustavo Petro es la intensa rotación, pero sobre todo el apoyo que ha tenido en todos los puntos de opinión el exministro Guevara, quien, según los expertos, estaba haciendo bien su tarea.
El ex ministro de Hacienda de Gustavo Petro José Antonio Ocampo manifestó que la designación de Diego Guevara al frente de la cartera económica fue una decisión acertada del jefe de Estado. “La solicitud de su renuncia por un decreto de aplazamiento de gastos que era necesario es, por el contrario, equivocada. Felicito al Ministro Guevara por sus decisiones, acordes con la tradición de responsabilidad fiscal del país y lamento enormemente su retiro”.
Además, resaltó: “Un buen ministro de Hacienda es el que le tiene que decir no al presidente cuando toca, y este fue el caso específico del ministro Guevara, cumpliendo su tarea”.
Por su parte, el también ex ministro de Hacienda Mauricio Cárdenas fue más crítico en decir que el objetivo del presidente Petro es ganar las elecciones y no importarle el déficit fiscal.
“La cosa es sencilla, el objetivo principal del Gobierno es olvidarse justamente del déficit para poder tener un presidente amigo de Petro en el 2026, y eso no le va a funcionar, porque el mayor gasto no le va a dar popularidad al presidente Petro. El mayor gasto y el mayor déficit fiscal va a significar que suba el dólar, que suba la tasa de interés, y que la economía colombiana entre en una situación de debilidad. El presidente se equivoca sacando a Guevara, que ha hecho la tarea justa de controlar el déficit fiscal y que ya estaba hablando del recorte. Yéndose en la línea política poniendo a un amigo para que gaste más es poner en peligro la situación económica de todos, y esa es la peor inversión del presidente Petro”, expresó.
Por su parte, el presidente de la Andi, Bruce Mac Master, expresó que tres ministros de Hacienda en menos de tres años envían una pésima señal a los mercados sobre la intención del Gobierno de implementar una política fiscal estable y confiable. “Esto habla muy mal de la forma como se lideran los temas más importantes del país”.
El ex ministro de Hacienda y actual rector de la Universidad EIA, José Manuel Restrepo, sentenció que tiene que generar la confianza, ya que es un ministro que llega con un altísimo nivel de rotación a una cartera que históricamente ha sido mucho más estable.
“Pero además llega en un momento donde la prioridad tiene que ser ordenar las finanzas públicas, enviar señales de tranquilidad, recorte en gasto y derroche que ha realizado este gobierno, garantizar el cumplimiento de la regla fiscal que se incumplió en 2024 y que no se debería incumplir en 2025, por lo tanto debe hacer un recorte de por lo menos $40 o $50 billones, y eso lo debe transmitir de una manera clara y contundente en el Marco Fiscal de Mediano Plazo (Mfmp) que debe presentar”, sostuvo Restrepo.
Aumenta incertidumbre
En diálogo con EL HERALDO, el director de Investigaciones Económicas de Corficolombiana, César Pabón, afirmó que los constantes cambios en el timonel del barco generan incertidumbre, pero también lo hacen las condiciones en las que se encuentra. La situación fiscal es muy compleja: el ajuste necesario para cumplir la regla fiscal supera los $20 billones y es evidente que las presiones seguirán en aumento. Por ello, lo primero que esperamos del ministro es certidumbre y compromiso con el cumplimiento de las metas fiscales y con el pago de las obligaciones establecidas por el Gobierno”.
Críticas a Germán Ávila
El nombramiento de Germán Ávila, con más de tres décadas de experiencia en el sector de la vivienda social, pero ninguno en la hacienda pública, ha generado críticas. Hernando Zuleta, decano de Economía en la Universidad de los Andes, considera que no está preparado para el cargo y anticipa que “si el presidente Petro ha buscado a un amigo de toda la vida, alguien acrítico con su liderazgo, la fórmula puede salir mal”.
“Al presidente le quedan 16 meses en la Casa de Nariño y quiere que todas las fuerzas se concentren en su proyecto político. Exije de sus ministros que sean leales a toda prueba y comulguen con sus objetivos”, sostuvo.
Por su parte, Mauricio Cárdenas puntualizó que este va a ser un ministro que va a aumentar el gasto público, que va a ignorar completamente la regla fiscal y que va a hacer eco a la tesis de Gustavo Petro.
Puntos a trabajar
César Pabón de Corficolombiana expresó que, en primer lugar, Germán Ávila deberá realizar el ajuste fiscal necesario para generar credibilidad en el cumplimiento de las metas fiscales de este año y en la senda hacia la sostenibilidad fiscal.
“Pero su labor va mucho más allá, el ministro es el guardián de la estabilidad macroeconómica y, en general, debe transmitir tranquilidad y confianza en un entorno de alta incertidumbre tanto a nivel local como global”, manifestó Pabón.
A su vez, Henry Amorocho, profesor de Hacienda Pública de la Universidad del Rosario, señaló a EL HERALDO que el verdadero reto que tiene el nuevo ministro de Hacienda es llevar a cabo el saneamiento de las finanzas públicas.
Además, sostuvo que tiene la misión de solucionar el reto fiscal que vienen identificando las calificadoras de riesgo tales como Fitch Ratings y JP Morgan.
“Ya observábamos que en el mes de enero el déficit fiscal tuvo un comportamiento de aumento en el -0,7 %, y eso comienza a dar señales de alerta de que la situación a solucionar en el déficit fiscal implicaría conseguir recursos en el interior o por fuera del país. En este último aspecto ya la verdad es que los márgenes de la regla fiscal no dan más para endeudarse, de hecho el endeudamiento se aumentó en USD5.000 millones”, expuso Amorocho.
Recordó que ya al interior del Congreso se han manifestado que no ven con buen recibo una reforma tributaria y que no es la salida que ellos ven. “Entonces el gran reto es que la mirada que va a tener que hacer y la utilización que va a tener que hacer es la de su misma casa, la de colocar en efectividad el desempeño de la Dian para subir el recaudo por lucha contra la evasión y contra el contrabando del año pasado”, sostuvo el experto.
Entre tanto, José Manuel Restrepo enfatizó que el primer desafío que debe tener el nuevo ministro es de credibilidad y de confianza.
“Debe garantizar a los mercados internacionales y a las calificadoras de riesgo que va a hacer un manejo prudente de las finanzas públicas. Aclarar en fondo lo que probablemente fue la razón por la cual salió el ministro Diego Guevara, y es por decirle no al presidente de la República en el congelamiento y recorte de gastos que se necesitan. A este ministro le va a corresponder hacer esos recortes, porque, de no hacerlo, sería muy imprudente y además irresponsable en el manejo de las finanzas públicas”, precisó el hoy rector de la EIA.
Añadió de paso que la gran responsablidad que tiene es la recuperación del crecimiento de la economía colombiana.
“Pero eso no es en 2,6 % o el 3 %. Tiene que lograr que la economía crezca al 4 %, al 5 %, incluso al 6 %, y tiene que conducir la economía por esa senda para que el recaudo tributario no se caiga”, puntualizó Restrepo.