El 2024 fue uno de los años más retadores para Colombia en materia económica, y aunque el crecimiento de la economía fue leve, en lo que sí se puede considerar que “perdió el año” fue en el recaudo tributario, puesto que por la desaceleración económica y la incertidumbre política y social las empresas presentaron un pésimo año en materia de tributación, y eso se notaba mes a mes cuando la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian) revelaba los desplomes considerables del recaudo tributario del país.
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El último reporte de la entidad conocido hasta ahora reveló que desde enero hasta octubre de la vigencia 2024 el recaudo de impuestos iba en $223,86 billones, lo que significó una caída del 6,7 % frente al año anterior. En ese mismo periodo de 2023, el recaudo fue de $240,1 billones.
Diferentes expertos económicos, gremios y organizaciones han alertado constantemente frente a la mala situación que afronta el recaudo del país, que sigue sin ver una luz al final del túnel, en el que incluso afirman que el Gobierno nacional fue muy optimista al sacar las cuentas, y más en estos tiempos en el que la desaceleración económica continúa pesando en las empresas colombianas, y por ende tributan menos, o en su defecto dejaron de tributar porque se fueron del país o simplemente la empresa quebró.
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Las razones
En diálogo con EL HERALDO, diferentes analistas económicos, exministros y empresarios revelaron las razones del desfase del recaudo tributario para 2024, que no fue el mejor en materia de impuestos y decisiones del Gobierno nacional.
Según José Manuel Restrepo, ex ministro de Hacienda y actual rector de la Universidad EIA, lo que viene afectando las empresas, y sobre todo la inversión privada y ahora la Inversión Extranjera Directa (IED), que tienen un comportamiento negativo, es la incertidumbre política y social.
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“Esta incertidumbre genera desconfianza y que en gran parte impone la presión en la toma de decisión de inversión. Esa incertidumbre se refleja en lo que sucedió en el Presupuesto Nacional con la ley de financiamiento, lo que está sucediendo con la reforma laboral, con la reforma a la salud. Todos esos mensajes no son positivos para la inversión, y al no ser positivos afectan al recaudo tributario”, expresó Restrepo a este medio.
Añadió, como segundo lugar, que esto es consecuencia de una reforma tributaria de 2022 que elevó de manera excesiva el costo inversionista-socio del sector productivo.
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“Cuando eso sucede, evidentemente hay un desincentivo de inversión privada en el país. Hoy la inversión privada en relación al Producto Interno Bruto (PIB) es la más baja en la historia de Colombia desde que existe, y con esa realidad de inversión es muy difícil que exista un buen recaudo tributario. Y en tercer lugar tampoco ayuda el bajo crecimiento que, aunque es cercano al 2 %, sigue siendo muy bajo.
Con ese nivel de crecimiento, sumado al del año anterior (0,6 %), que es el que todo se refleja en el recaudo tributario de este año, pues las posibilidades de recaudo se vuelven limitadas”, afirmó Restrepo, quien señaló aparte que el Gobierno cometió el error de haber sobreestimado los ingresos tributarios, y eso no ayuda realmente en la construcción de un presupuesto de la Nación.
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Por su parte, el ex director de la Dian Lisandro Junco Rivera le dijo a EL HERALDO que esto es consecuencia de una “improvisación del lado del Gobierno” en materia de política fiscal.
“Primero hablaban de que el 2023 era supuestamente el año con mayor recaudo en la historia del país, cuando no se logró cumplir la meta, cuando el recaudo neto no fue suficiente frente al presupuesto aprobado para el año 2023.
El 2024 fue casi que la misma suerte, empezaron engañando, mintiendo, generando fábulas de que iban a recaudar sobre algo que no existe, que no es ley, que no es aplicable al Tribunal de Arbitramento Tributario, en donde supuestamente iban a recaudar $15 billones como si fueran a ganar todos los pleitos aribtrales, si se llegara a aprobar alguna ley, casi como decir que los árbitros que se iban a nombrar si se aprobaba la ley eran notarios de la gestión de la Dian, es un tema absolutamente falso”, manifestó Junco.
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En ese sentido, agregó que no se está gestionando la cartera de los estados financieros. “Hoy tenemos una cartera de $48 billones con corte a septiembre, y esta viene siendo la cartera más alta de la historia, equivalente a tres reformas tributarias mal contadas, y no se está gestionando. Cada vez crece, crece y crece, cuando en pandemia teníamos una cartera de $25 billones”.
“Esta cartera no la están gestionando porque cada vez conduce las estrategias de recaudo hacia lo que no es. No hay resultados contundentes en materia de fiscalización, por ende el recaudo de 2024, lamentablemente, por más que les bajen la meta, no lo van a cumplir y quedó, como en el de 2023, completamente desfinanciado”, señaló el ex director de la Dian.
Desfase en el PIB
Henry Amorocho, profesor de Hacienda Pública de la Universidad del Rosario, recordó que la meta de recaudo publicada en el Marco Fiscal de Mediano Plazo (Mfmp) en el 2024 era de $258,6 billones, y aproximadamente se prevé que se recaudará para toda la vigencia solamente $246,9 billones para una diferencia aproximada de $12 billones, correspondiente a un 10 % por debajo de la meta que fijó el Gobierno nacional.
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“Desde principio de año, la baja del recaudo tributario en parte se debe al hecho que hubo una estimación de las variables macroeconómicas por encima de lo que verdaderamente daban. Tan solo por crecimiento económico que no se dio, se puede encontrar un desfase de aproximadamente $5,7 billones, porque se pensó que la economía iba a crecer en un 1,4 %, y en realidad creció al 0,6 %, entonces ahí hay un desfase tremendo de más del 60 % del crecimiento que afecta el recaudo”, dijo el experto.
En el componente empresarial también se vio afectado por el hecho, y que fue declarado inconstitucional, de la no deducibilidad de las regalías por parte de la Corte Constitucional. “Entonces esos $6 billones que se esperaban no se dieron”.
Afectó el precio del petróleo
El profesor Henry Amorocho anotó que el no cumplimiento del recaudo se debió también a los precios del petróleo que no han tenido un comportamiento tan alto como los del año pasado.
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“Por ahí también se sensibilizó, y a principio de año también bajaron algunas materias primas, y eso afectó los ingresos nuestros por la parte de tributos, sobre todo en exportaciones”, señaló Amorocho.
En las empresas
En diálogo con EL HERALDO, el economista Joseph Daccarett analizó que el factor importante que influyó para que las empresas tributaran menos fue la manera como el Gobierno ha querido desmontar algunos segmentos para darles prioridad a otros.
“Es como lo que está pasando con el carbón y el petróleo, yo no estoy diciendo que haya que dejarlo, no, hay que desmontarlos, porque así va el mundo, que en ese sentido digamos que el presidente Petro tiene razón, pero lo que quiero decir es que la manera como el presidente lo ha querido desmontar ha afectado no la producción, pero sí la inversión, ¿Por qué? Porque cuando se dice que estos dos segmentos de la economía se van a desmontar, se aleja la inversión.
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Es cuestión de ver la realidad, la inversión extranjera, principalmente en la parte de petróleo y carbón, ha caído, se han generado unas reducciones en el ritmo de inversión durante el año 2022 y 2023, y esto afecta negativamente el desempeño de la economía, y ahora la inversión extranjera ve a Colombia o a la economía de Colombia con mucha preocupación y desconfianza”, precisó Joseph Daccarett.
¿Qué queda?
Esa es la pregunta que muchos se hacen, y para Lisandro Junco Rivera, ex director de la Dian, lo que queda ahora realmente es el Impuesto al Valor Agregado (IVA), que es el que puede salvar la patria para este 2025 si hay eventualmente un plan de reactivación económica, al igual que el Regimen Simple de Tributación (RST), que es el que está sacando la cara por el recaudo tributario.
“Lo más importante es que el Gobierno entienda que el presupuesto se tiene que acomodar al ingreso. Ese viene siendo el mapa que tiene el recaudo tributario de nuestro país, no es más”, manifestó el ex director de la Dian, Lisandro Junco Rivera.
Gobierno se quedó corto con el recorte para cumplir con regla fiscal
Teniendo en cuenta que las cuentas de recaudo de la Dian no se cumplieron, y pese a que el Gobierno hizo esfuerzos en recortar el gasto público a través de decretos de aplazamiento y recortes, que contribuyeron a un ajuste fiscal de $20,6 billones en el Presupuesto, el Comité Autónomo de la Regla Fiscal (Carf) sostiene que esa tarea se debe multiplicar para cumplir con la meta del gasto fiscal.
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Según las cuentas del Comité, para cerrar 2024 el recaudo tributario se ubicará en $15 billones por debajo de la meta del Marco Fiscal de Mediano Plazo, y $72 billones menos a los ingresos tributarios que se estimaron en el Presupuesto General de la Nación (PGN).
En esa misma línea, alertaron que si el Gobierno no hace un recorte de $40 billones al Presupuesto General del año que terminó, no podrá cumplir con la meta del déficit de -5,6% del Producto Interno Bruto (PIB).
“Se requieren de medidas adicionales que representan cerca de 2,4 % del PIB”, manifestó el Comité Autónomo de la Regla Fiscal en su último informe.
