Cuando Junior disputa un partido decisivo, como es el caso de una final, Barranquilla se paraliza, y si hablamos del comercio, sea formal o informal, se convierte en una gran oportunidad para incrementar sus ventas.
Negocios informales, formales, bares, discotecas, entre otros, ven la gran final como una gran oportunidad para mejorar su actividad económica. Camisetas, gorras, pulseras y banderas, lo que más se vende.
Cuando Junior disputa un partido decisivo, como es el caso de una final, Barranquilla se paraliza, y si hablamos del comercio, sea formal o informal, se convierte en una gran oportunidad para incrementar sus ventas.