Un buque proveniente de Turquía con 35 mil toneladas de clinker que tenía como destino la zona portuaria de Barranquilla tomó la decisión de desviar hacia el Puerto de Cartagena por las condiciones del canal de acceso al puerto.
'El buque venía calando 9,8 metros con el mensaje de seguridad de 9,9 metros (canal de acceso) y había proyectado su arribo porque estaba dentro de esas condiciones', explica el director de la Asociación de Puertos del Atlántico (Asoportuaria), Lucas Ariza.
Con el cambio del mensaje de seguridad de 9,9 metros a 9,3 metros, lo que indica que buques con calado mayora 9,3 metros no pueden ingresar a la zona portuaria, decidieron dejar parte de la carga en otro puerto.
El director de la Asociación de Puertos del Atlántico dijo que teniendo una draga permanente en la ciudad no se ha logrado dar la estabilidad que el canal de acceso al puerto requiere.
Indicó que un desvío de un barco de su ruta original puede representar sobrecostos por el orden de los 120 mil o 150 mil dólares y afecta la competitividad de la ciudad que no es la primera vez que se presenta.
'Es complicado entender cómo teniendo la draga permanente seguimos en esta situación', sostuvo el dirigente gremial.
Si bien el empresario destaca que el río tiene una dinámica para esta temporada que está marcada por las fuertes lluvias que generan más sedimentos, dice que esto es algo que ya se conoce, no es nuevo por lo que el dragador puede ser más previsivo.
Hay un canal conceptual y debe quedar listo para asegurar la estabilidad y seguridad en las maniobras, por lo que habiendo tanto sedimento y un mayor caudal, el contratista debe verificar que las condiciones queden como están estipuladas y contratadas.
'Hemos visto que el canal no queda en esas condiciones y entonces terminamos apagando incendios cada semana y la draga tiene que trabajar en Bocas de Ceniza y eso no es normal. Algo no está quedando como debe para que tengamos que esta esta condición', dijo Ariza.