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La firma calificadora de riesgo Standard & Poor´s (S&P) mantuvo la calificación de Colombia como emisor de deuda soberana en moneda extranjera en BBB- y en moneda local en BBB, con perspectiva estable.

La decisión de mantener la calificación del país en BBB-, en el umbral de grado de inversión, se basó en la estabilidad de la institucionalidad y el manejo macro prudencial que ha mantenido el país.

La agencia espera que, pese a que la Corte Constitucional declaró inexequible la Ley de Financiamiento, la institucionalidad que ha caracterizado al país permitirá para sacar adelante políticas que vayan en favor de garantizar la sostenibilidad fiscal y el crecimiento económico.

Resaltó el comportamiento y desempeño reciente de la actividad económica. Indicó que la fase de aceleración en la que se encuentra la economía se ha venido consolidando y ha llevado a que el país se aleje del desempeño que han presentado la mayoría de los países de América Latina. Esto debería ayudar a que la deuda general del gobierno se logre estabilizar.

S&P resaltó que los riesgos continúan estando concentrados en el perfil externo del país. En particular destacó que los choques podrían acentuarse como resultado del alto nivel de la deuda externa y la falta de liquidez o de apetito por riesgo que ha caracterizado a los mercados internacionales en las últimas jornadas. Sin embargo, se espera que el mecanismo de tasa de cambio flotante continúe absorbiendo los posibles impactos negativos sobre la economía.

La calificadora estima que la economía colombiana crecería a un ritmo de 3,2% en 2019 y 2020, y que los siguientes dos años el dinamismo de la actividad productiva se estabilizaría alrededor de 3,3%. Coincidimos con la entidad en resaltar que el ciclo económico por el que atraviesa el país se diferencia notablemente del de sus pares de la región y que también el comportamiento de la demanda interna seguirá inclinando la balanza hacia un escenario constructivo, lo cual seguirá siendo un contrapeso importante a la tendencia de desaceleración global. Además, en esta perspectiva el organismo espera que la tasa de desempleo disminuya por debajo del 10%.