Las proyecciones del Banco Mundial para este 2018 indican que Colombia superará el estancamiento económico que caracterizó al 2017; pronostica un crecimiento de 2,9% para este año y de 3,4% en 2019. Según la entidad, la economía se dinamizará, principalmente, por estos factores: el incremento del consumo privado, motivado por los bajos niveles de inflación; el estímulo de las exportaciones, los rendimientos del aumento en el precio del petróleo; y por inversión en infraestructura.
Las cifras son por lo menos optimistas si se miran los resultados de 2017, cuando la economía creció 1,8 %, según el Dane; la más baja desde 2009. Pese a que el Gobierno esperaba crecer a niveles del 2%, sectores como la construcción y minería mostraron estancamiento en sus niveles de producción.
Santiago Giraldo, director financiero de Tecnoglass, una de las empresas exportadoras más importantes de Colombia, plantea que en el 2017 se presentaron choques específicos asociados con la reforma tributaria, a la alta inflación y a unas altas tasas de interés que a través de la política monetaria del país se han reversado.
De acuerdo con Girarlo, el 2018 debe ser mucho mejor, pues el ambiente está propicio para incentivar el consumo privado. 'El consumo representa dos tercios del PIB de una nación. Tener baja inflación y bajas tasas de interés debe incentivar sectores como la construcción, donde ya nosotros, desde el punto de vista de Tecnoglass, hemos visto una reactivación de la actividad. Creemos que la proyección de crecimiento aproximada para 2018, de 2,8%, se debe dar, y que la industria se debe reactivar si mejora el consumo', agrega.
Por su parte, Jorge Quintero, coordinador del doctorado en Economía de Uninorte, considera que la economía colombiana no debe ser tan dependiente de los recursos mineros en el mediano plazo, pues en algún momento se agotarán. 'También hay que evitar que el desempeño económico se mantenga condicionado al comportamiento de los precios internacionales de los productos mineros'.
Perspectivas 2018. El reciente informe del Banco Mundial plantea que el aumento de la inversión, la estabilidad en la situación fiscal y el incentivo en la producción de los sectores más productivos del país serán los factores que incidirán sobre el crecimiento económico de Colombia en el 2018.
Se espera que la inversión sea un factor determinante este año, luego de que en 2017 presentara una recuperación: hubo un incremento del 5% en el flujo de inversión extranjera directa con respecto al 2016. Para Giraldo, no se debe depender de los recursos naturales, sino que es necesario invertir en innovación en infraestructura, en industria para diversificar la fuente de ingresos y hacer que el crecimiento sea sostenible.
'El problema de la industria colombiana es que nos ha faltado buscar una base de diversificación más allá de las materias primas. Es la enfermedad holandesa que tienen muchos países en Latinoamérica y en países emergentes, donde nos quedamos simplemente atados a depender de los recursos naturales', agrega.
Por otro lado, la estabilidad fiscal que ha presentado el país luego de la implementación de la reforma tributaria indica una reducción del déficit fiscal y un buen comportamiento de las finanzas del estado hacia la regla fiscal.
Diana Reyes, jefe de la oficina de proyectos de la Cámara de Comercio de Barranquilla, plantea que es indispensable orientar los esfuerzos de la política pública para incentivar la complejidad de la estructura productiva y la producción de bienes y servicios de mayor valor agregado.
'La sofisticación de los territorios permite a las empresas participar en cadenas de valor globales y desarrollar actividades de alta productividad que conducen a un desarrollo más rápido y sostenido', señala Reyes.
Para fomentar el crecimiento económico colombiano de 2018, es necesario estimular la tecnificación de sectores altamente productivos como el agrícola. Según el Dane, el sector con mejor desempeño en 2017 fue el de agricultura, ganadería, caza, silvicultura y pesca, con un crecimiento de 4,9%; un comportamiento positivo que se mantiene desde 2010.
Colombia cuenta con una amplia cantidad de terrenos disponibles que podrían ser aprovechados para la producción agrícola. De hacerlo se impulsaría el desarrollo socioeconómico a través de la generación de empleo y alternativas para obtener ingresos. 'Se debe pensar en impulsar el crecimiento de otros sectores de la economía, no solo el agropecuario sino también otros altamente generadores de empleo, como la industria manufacturera y la construcción', puntualiza Quintero.
Análisis La economía tendrá un crecimiento cercano al 3%*
La proyección de crecimiento del Banco Mundial para la economía colombiana en 2018 es realista. Es muy posible que el crecimiento sea cercano al 3%, debido a que están disminuyendo significativamente los efectos negativos por causa de la fuerte caída en los precios del petróleo.
Sin embargo, este escenario está condicionado a muchos factores, entre ellos, a que se sigan recuperando los precios del petróleo, y a que la inflación se mantenga controlada y ofrezca margen para que se pueda seguir relajando la política monetaria. También serán muy importantes los mensajes que en materia económica transmitan durante este primer semestre los candidatos más opcionados a ganar las elecciones presidenciales, y en el segundo semestre quien resulte elegido'.
*Jorge Quintero, coordinador del doctorado en Economía de Uninorte.