Los extremos no son buenos y Marlon Piedrahíta lo sabe. Por eso espera que Junior no encare el partido contra el América, en la vuelta de la final de la Liga Águila II, este sábado en Cali (a las 4 p.m.), con la pasividad que se le vio ante Tolima en el inicio de los cuadrangulares semifinales ni con la precipitud que se le apreció frente a los escarlatas en el primer round de la pelea por el título. Ni negro ni blanco, mejor gris.
'Quisimos ser muy verticales (en el choque inicial ante América), le imprimimos mucho vértigo, teníamos jugadores muy rápidos que cogen la pelota y quieren ir al frente siempre, creo que equivocamos el camino en ese sentido. Contra Tolima en el primer partido estuvimos totalmente diferentes, se vio un equipo aperezado, soso, esta vez estábamos en el otro extremo, no tuvimos la suficiente capacidad de encontrar el punto medio, como para hacer nuestro fútbol, desequilibrar y obtener un buen resultado. Ya pasó, hay que corregir este partido de la mejor forma y llevarlo adonde nosotros somos fuertes y ojalá podamos celebrar el sábado', comentó Piedrahíta en diálogo con los medios de comunicación, anoche en la sala de prensa de la sede Adelita de Char, en Sabanilla.
Allá entrenó este martes el equipo rojiblanco ante la mirada de los periodistas deportivos, desde las 4:30 de la tarde. Después de la ligera práctica, en la cual la mayoría de los titulares del primer capítulo de la final hicieron ejercicios aparte, mientras los otros desarrollaron un rato de fútbol y espacio reducido, Piedrahía y Teófilo Gutiérrez, ya entrando la noche, atendieron a la prensa.
El lateral derecho paisa no niega que 'sí se siente nervio' ante el desafío que plantea la última instancia de la Liga, a pesar de que él y la mayoría de sus compañeros vienen de ganar dos títulos en esta competencia y de disputar una final de la Copa Sudamericana. Hay presión y hambre de gloria.
'Yo pienso que ya tenemos una historia importante en el club, linda y positiva, no solamente con la dos Ligas, sino también con la final de la Copa Sudamericana. Emocionalmente, en la cabeza de nosotros los jugadores, se mueven muchísimas cosas. Yo no creo que el equipo esté tranquilo, el equipo el mismo nervio, lo digo yo a título personal, sería un mentiroso al decir que no se siente lo mismo que se siente en este tipo de situaciones. Hay que canalizarlo de buena manera. Las emociones debemos llevarlas de la mejor forma y competir en una plaza dura, donde seguramente habrá muchísima presión. Más allá de que ya tengamos el cupo a Copa Libertadores, el deseo y el anhelo de nosotros es conseguir la décima estrella y vamos a dar lo mejor por ella', anunció el antioqueño de 34 años de edad.
'Nosotros no nos sentimos con presión, son situaciones o cosas que pueden pasar por la cabeza de nosotros los jugadores, pero si nos vamos a los extremos podemos decir que somos bicampeones y no tenemos la necesidad de la tercera estrella, pero entonces nos estaríamos equivocando. Y si nos llenamos de presión con que queremos conseguir el tricampeonato y como sea lo tenemos que hacer, no. Estamos en un punto en que las emociones las sabemos manejar como equipo, como grupo. Tenemos experiencia en este tipo de circunstancias y debemos canalizarla de la mejor forma', agregó.
En cuanto a lo que imagina para el partido de vuelta, Piedrahíta dijo: 'Puede sonar a frase de cajón, pero va ser un partido diferente. La verdad es que yo esperaba que América, por ser un equipo de trayectoria, un equipo grande en Colombia, atacara un poco más en Barranquilla o saliera a proponer un poco más, pero se replegaron bien, hicieron un trabajo táctico bastante importante metiéndose un poco atrás, principalmente en el segundo tiempo. Por ser locales ahora, por el entusiasmo de su gente, van a salir a proponer un poco más y en ese sentido va ser un partido diferente al de acá. Esperamos, con la bendición de Dios, estar en un muy buen día, competir al más alto nivel frente a un gran rival y pelear el título'.