Unión Magdalena lamentó y rechazó, a través de un comunicado, los actos vandálicos de un grupo de barristas azulgranas que invadieron la cancha y obligaron la suspensión del partido que el cuadro samario perdía 1-0 ante Once Caldas, en el estadio Sierra Nevada, de Santa Marta, en el minuto 78.
“Rechazamos con firmeza los lamentables hechos ocurridos el domingo 4 de mayo en el Estadio Sierra Nevada de Santa Marta, donde un grupo de individuos del “barrismo” que acude a las tribuna norte y sur invadió el terreno de juego, causando destrozos en las instalaciones y agrediendo verbalmente a jugadores, árbitros y miembros de la fuerza pública. Estas acciones vandálicas interrumpieron el normal desarrollo del partido y pusieron en riesgo la integridad de quienes solo buscaban disfrutar del espectáculo deportivo”, expresó el club bananero, quien solicitó a las autoridades una pronta y contundente intervención para hallar a los principales culpables de los bochornosos episodios de violencia.
“Como institución, condenamos de manera enfática toda forma de agresión y destrucción de bienes públicos, es por ello que, hacemos un llamado urgente a la Policía Nacional y a la Fiscalía General de la Nación para que investiguen con celeridad estos hechos, identifiquen y judicialicen a los responsables conforme a lo establecido en el Código Penal Colombiano, asegurando que cada acto violento reciba la sanción que la ley prevé”, pidió el equipo.
Unión Magdalena, en cabeza de su presidente, Alberto Mario Garzón, anunció que “mantendrá su compromiso de trabajar incansablemente para que el estadio Sierra Nevada sea un escenario seguro y digno de nuestra ciudad. Estos actos no reflejan el sentir de los samarios ni los valores de Unión Magdalena que siempre ha contado con una hinchada que se caracteriza por el civismo, la pasión y el respeto que profesa al fútbol y a la ciudad de Santa Marta, especialmente en este año en que Santa Marta celebra sus 500 años de historia y tradición, por lo que reafirmamos nuestro compromiso e invitamos a todos los samarios, a los medios de comunicación y a la comunidad futbolera a sumarse a este propósito común: defender el fútbol como un espacio de unión, paz, alegría, y no de violencia”.