El Betis logró una remontada de las que quedan para el recuerdo (3-2), con tres goles en menos de veinte minutos de la segunda parte, ante un Leganés que hasta ese momento había obtenido más premio del merecido y que acabó pagando muy caros dos errores de Marko Dmitrovic.
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El colombiano Juan Camilo ‘Cucho’ Hernández, al minuto 83, anotó el tercer tanto del triunfo del cuadro sevillano. La celebración del delantero, que no fue tenido en cuenta en la convocatoria de la Selección Colombia, fue efusiva y con un mensaje: “¡Aquí estoy yo! ¡Aquí estoy yo! ¡Aquí estoy yo!”. Repitió varias veces mirando a la tribuna y en medio de los abrazos de sus compañeros.
Es la primera diana del atacante risaraldense desde que arribó al Betis procedente del Colombus Crew, de la la MLS.
Varios son los problemas que tiene el cuadro leganense en lo que va de curso y que explican su posición en la tabla. Dos de ellos son la falta de gol de los delanteros centros y la dificultad para alinear en ataque y en un mismo once a dos de sus jugadores más talentosos, Dani Raba y Juan Cruz. Un experimento puede haber acabado con ambos de golpe.
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En su afán por buscar soluciones, Borja Jiménez sorprendió alineando al primero de ‘9′ y devolviendo al segundo a su posición natural, la de extremo derecho. Y de repente ‘¡Eureka!’; el ‘sudoku’ se desbloqueó y todo empezó a encajar en un una primera mitad en la que lo único que brilló fue el oro que sacó Dani Raba de dos acciones aisladas.
La primera llegó al filo de la media hora, tras un córner en contra que no debió serlo, pues inexplicablemente Matija Nastasic envió la pelota fuera con todo a favor para despejarla o dejarla salir. Hay veces que la felicidad nace en los lugares más inesperados.
Sacó de esquina el Betis y la jugada acabó en las botas de Natan, aún en campo contrario. Se lio el brasileño, capturó la pelota Raba e inició una carrera a campo abierto hacia la portería en la que solo se llevó puesto a Diego Llorente. Aguantó bien el central e incluso hubo un momento en el que parecía haber ganado la batalla, pero el atacante se tiró al suelo para rebañar la pelota y eso le permitió reanudar la jugada y marcar de tiro raso cruzado.
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Ese tanto ya de por sí parecía demasiado castigo para el Betis, que a pesar de quedarse corto en las 72 horas de descanso tras su remontada en Guimaraes, dominó en busca de su quinta victoria liguera seguida. Pero había más espacio aún para el martirio, con la colaboración de un verdugo criado en casa.
Juan Cruz, agradecido por la oportunidad de poder desenvolverse en su hábitat natural, quemó el costado diestro con su velocidad cuando el descanso pedía paso y sirvió un centro al corazón del área, donde apareció de nuevo Raba para rematar a placer como si fuese ariete de cuna.
El partido daba argumentos a los pesimistas del Leganés para pensar que todo estaba saliendo demasiado bien como para que no comenzaran a aparecer las desgracias. Y estaban en lo cierto, llegaron todas de golpe. En poco más de veinte minutos, lo que pintaba a duelo plácido se convirtió en ‘Falcon Crest’, un drama por capítulos.
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Todo comenzó con la lesión muscular de Dani Raba, dos minutos antes de que Dmitrovic tornase en el ‘villano’ de la película. El serbio, que tantas veces ha salvado al Leganés, que sostuvo sobre sus hombros la inolvidable victoria a domicilio ante el Barcelona, arrasó esta vez con todo lo cosechado.
Así, cometió un penalti sobre Cédric Bakambu después de darse demasiado largo un balón con un pie cuando tenía la situación controlada. Isco no perdonó en ese lanzamiento, como tampoco lo hizo poco después el delantero congoleño cuando el arquero dejó muerto en el área pequeña el esférico tras un tiro lejano de Marc Bartra que no parecía llevar peligro.
Entre medias, el Leganés vio cómo le anulaban un gol por fuera de juego a Miguel de la Fuente y cómo se marchaba también del campo por problemas físicos una pieza clave, Yvan Neyou. Y poco después el gol de Juan Camilo ‘Cucho’ Hernández que certificaba la remontada, enganchando con el alma un centro de Antony tras una rápida contra guiada por el brasileño.
El choque deja por primera vez este curso al Leganés en puestos de descenso a la conclusión de una jornada. Y al Betis igualado con el Villarreal en la lucha por acceder a la Liga Europa e inmerso en una racha de triunfos ligueros que puede ser de seis, algo que solo ha sucedido dos veces en la historia, si gana al Sevilla.