El derbi londinense acentuó la mejoría del Tottenham que aprovechó la crisis de su vecino, el Chelsea, para asentarse en la parte alta de la Premier mientras agranda la intranquilidad de los 'blues', en caída libre.
Los dirigidos por Antonio Conte concretaron un partido cerrado en el que se llevaron la victoria por un marcador de 2-0 con goles de Oliver Skipp y Harry Kane.
El derbi londinense acentuó la mejoría del Tottenham que aprovechó la crisis de su vecino, el Chelsea, para asentarse en la parte alta de la Premier mientras agranda la intranquilidad de los 'blues', en caída libre.