Titanes vs. Cimarrones: comienza la batalla final por el pentacampeonato

A Titanes de Barranquilla no le basta con ser el actual tetracampeón del baloncesto profesional colombiano. El quinteto barranquillero quiere más. Su ambición lo lleva a buscar, como sea, un pentacampeonato, que no solo ampliará su admirada hegemonía, sino que lo pondrá en un pedestal altísimo en la historia de la pelota naranja en nuestro país.

Pero para lograrlo tendrán que superar a unos Cimarrones del Chocó que vienen dando golpes en los playoffs de la actual temporada de la LPBC. El quinteto del pacífico se clasificó como séptimo en la fase inicial, pero en las finales han sacado lo mejor de su juego, dejando en el camino a Cafeteros (2-1 la serie) —en cuartos— y a Motilones del Norte (3-1) —en semifinales—, segundos y terceros, respectivamente, en la campaña regular.

El único antecedente que existe en este curso entre Titanes y Cimarrones fue el choque que protagonizaron en la cuarta jornada del ‘Todos contra todos’, donde el cuadro barranquillero se impuso con autoridad por 109-65, con Ernesto Oglivie (19 pts), Jonathan Rodriguez (17) y Selem Safar como figuras (13). Mientras que por el conjunto del pacífico se destacó Dominique Morrison, máximo anotador de aquella noche con 20 puntos.

Titanes pondrá esta tarde en el maderamen del estadio Ginny Bay, de la isla de San Andrés, la misma base que ha venido actuando, con Atencia, Ayarza, Oglivie, Jonathan Rodríguez y Safar, mientras que Cimarrones utilizará un equipo liderado por Dominique y custodiado por Gabriel Belardo, Adris De León, Charles Rhodes y Romario Roque.

La serie, al mejor de cinco juegos, se iniciará hoy, a partir de las 1:10 p.m. El resto de encuentros se disputará la siguiente manera: jueves 9 de diciembre (2:10 p.m.), segundo partido; sábado 11 (3 p.m.), tercero; domingo 12 (2:10 p.m.), cuarto, y martes 14 (2:10 p.m.), quinto.

Cimarrones llega con un par de días más de descanso que Titanes a este inico de la final, pero cuando en juego está el título, o un pentacampeonato, el cansancio pasa a un segundo plano.