Felicidades a Fernando Tatis Jr. y a su familia por el nuevo contrato que, a priori, debería asegurarle tranquilidad financiar a sus seres queridos.
El campocorto dominicano, una de las figuras jóvenes en Grandes Ligas, cara de la franquicia de los Padres de San Diego, aseguró extender su contrato con el equipo por 14 años y 340 millones de dólares.
El torpedero ha brillado en sus dos temporadas con los Padres con un juego de cinco herramientas, representando en intensidad, dinámica y mucho estilo.
Tatis ha irrumpido en el béisbol y ha dejado su huella pese a su corta experiencia. En 143 juegos de Las Mayores, el isleño tiene 39 jonrones, promedio al bate de .301 y OPS de .956.
La novena de California, viendo su desempeño en el terreno, su personalidad y el apego con la afición, variables que lo posicionan como el jugador perfecto para ser la cara de la franquicia, negoció la extensión que dejó a muchos boquiabiertos.
Si bien el contrato no es el más grande en la historia del béisbol (Betts y Trout, con 365 y 360, respectivamente, lo superan), ni lo hará el mejor pago por año en la pelota caliente, sí marca un hito, pues Tatis ni siquiera pasará por arbitraje. La apuesta de San Diego es total con el toletero.
En un pequeño juego, aquí desglosamos el contrato del jugador y buscamos representarlo —de una forma hipotética y alegre— lo que ganará el jugador y lo que podría comprar con el salario que devengará desde esta temporada.
A sus 22 años, ‘El Niño’, apodado así en la Gran Carpa, ganará, en promedio (no necesariamente está repartido así en el contrato) 24.2 millones de dólares al año.
Mensualmente, el número ‘23’ recibirá aproximadamente 2 millones de dólares estadounidenses por temporada hasta que tenga 36 años.
Tatis, que fue firmado como prospecto por los Medias Blancas de Chicago por 700 mil dólares en 2015, ganará 67.400 billetes de un dólar cada día.
Además, cada minuto que transcurra durante los próximos 14 calendarios, el pelotero registrará en su cuenta 47 dólares. Mientras usted lee esto, son cientos de dólares que el jugador ganó.
Y, para culminar este ejercicio matemático, Tatis devenga 78 centavos por segundo. Saque usted la cuenta.
Está bien, las cuentas son alegres y son parte de una simple dinámica curiosa. Tatis deberá pagar impuestos estatales, comisiones a representantes, abogados y demás, por lo que no verá la totalidad del monto al final del día.
Aunque si usted no se quiere poner tan exigente y considera llevadero este cómico y poco transcendental estudio, seguimos: Fernando Tatis Jr. ganará, a sus 22 vueltas al sol, lo suficiente como para comprar todos los días por los siguientes 14 años una camioneta Porsche Macan nueva. Son 5.110 camionetas en total y le sobran un par de miles de dólares, por si alguna emergencia.
Y, de necesitar donde vivir, el beisbolista no tendrá problemas. Tatis está en capacidad de adquirir, a su nombre, sin arriendo, dos casas por mes en la ciudad de San Diego hasta el 2035, cuando culmine el vínculo laboral. En total, 336 viviendas. Ningún familiar se quedará por fuera.
Así le va a Tatis Jr., el nuevo millonario que—ya en serio— deslumbra en el campo y ayuda, con su juego, a crecer el béisbol a lo largo y ancho del planeta.