El Nápoles, que visitará el próximo jueves al Granada en la ida de los dieciseisavos de final de la Liga Europa, triunfó por 1-0 este sábado contra el Juventus Turín en la vigésima segunda jornada de la Serie A y se vengó del cuadro turinés tras la derrota que este le endosó en la final de la Supercopa italiana.
Fue de nuevo un penalti la clave de uno de los clásicos de más tradición del fútbol italiano. En la Supercopa Lorenzo Insigne falló desde los once metros el posible empate, pero este sábado estuvo implacable, cruzó el disparo y envió el balón a la escuadra para anotar a la media hora de partido el gol decisivo.
Fue la única diana de un partido de gran intensidad, luchado y complicado para el Nápoles de Gennaro Gattuso, que llegaba a la cita tras la eliminación sufrida contra el Atalanta en las semifinales de la Copa Italia y que se medía con un Juventus en forma, flamante finalista copero.
Las dificultades llegaron ya en calentamiento previo al encuentro, cuando el meta colombiano David Ospina, elegido como titular, tuvo que rendirse por un problema físico.
Pero en el campo el Nápoles disputó un partido de gran compromiso, atento tácticamente y hasta estoico en el tramo final, cuando el mexicano Hirving Lozano tuvo que seguir jugando pese a tener un fortísimo dolor muscular en la pierna derecha.
Los napolitanos se adelantaron a la media hora gracias a un penalti otorgado por el VAR por un manotazo al defensa de Kosovo Amir Rahmani. Insigne se vengó tras el error en la Supercopa y celebró el gol con una camiseta especial y dedicatoria a su mujer.
Fue su gol 100 con la camiseta del Nápoles, el equipo de la ciudad en la que creció y del que es capitán.
La reacción del Juventus fue agresiva en la reanudación, pero ni el portugués Cristiano Ronaldo ni el español Álvaro Morata, al que fue anulado un gol por anterior fuera de juego de Chiellini, pudieron evitar una dura derrota.
Fue necesario un esfuerzo tremendo para Lozano, que sufrió una molestia muscular en el muslo derecho en los últimos minutos y que tuvo que seguir compitiendo para ayudar a los compañeros pues Gattuso ya no podía realizar más cambios.
El Nápoles asaltó la cuarta posición, que vale un billete para la Liga de Campeones y cortó una racha de tres victorias consecutivas en la Serie A del Juventus, que es ahora tercero y que podría quedarse a hasta diez puntos del líder Milan, si este gana este mismo sábado al Spezia.