Tom Brady tuvo otra demostración imperial y evidenció por qué es considerado por muchos como el mejor mariscal de campo en la historia de la NFL.
Brady lideró a los Bucaneros de Tampa Bay a la victoria del Super Bowl LV sobre los Jefes de Kansas City por marcador de 31-9.
Es el séptimo título de Super Tazón en la carrera del número ‘12’, que sigue ampliando su margen en este escalafón como el jugador con más anillos ganados en la historia. Charles Haley, ya retirado, es segundo con cinco triunfos.
La victoria de la franquicia de Florida llegó rápido y con contundencia. En el primer cuarto, los comandados por ‘TB12’ se fueron arriba 7-3 y demostraron que la defensiva iba a apoyar a su mariscal y a ahogar a Patrick Mahomes, QB de los Jefes.
En el segundo parcial, Tampa Bay se fue de largo. Dos touchdowns frente a un gol de campo de los de Kansas dejó el marcador 21-6 al descanso y la remontada para la organización de los Chiefs estaba cuesta arriba.
Mahomes guio a su ofensiva, iniciando el tercer cuarto, pero se quedó solo con tres puntos que medianamente le daban vida al equipo del coach Andy Reid.