El Liverpool arrancó este martes un agridulce empate a un gol ante el Sport Huancayo peruano en el partido de ida de la segunda fase de la Copa Sudamericana, una eliminatoria cuyo ganador se definirá la próxima semana en Montevideo.
Pese a que el gol visitante le da una ligera ventaja en caso de empatar a cero en el encuentro de vuelta, el equipo uruguayo tuvo en su mano llevarse el triunfo de Lima, pero le faltaron las fuerzas y acierto para el gol definitivo y al final acabó defendiendo con uñas y dientes el empate ante un Huancayo lanzado al ataque.
El partido tuvo dos lados casi antagónicos, uno primero marcado por el orden táctico y el control de juego en manos del Liverpool hasta el gol del delantero Juan Ignacio Ramírez.
Luego el encuentro se descontroló en un ida y vuelta donde el Huancayo obtuvo el empate con el lateral Hugo Ángeles y a punto estuvo de llevarse la victoria.
El Liverpool tuvo dos claras oportunidades para haberse ido al descanso con ventaja, primero con una jugada de tiralíneas al cuarto de hora que terminó con un disparo de Martín Correa que se perdió por el lateral de la red.
Luego fue un remate de cabeza de Ramírez en el saque de un libre directo desde la banda que el portero peruano Joel Pinto despejó de manera acrobática.
La mejor ocasión del Huancayo no llegó hasta los minutos finales del primer tiempo, cuando un mal centro de Hugo Ángeles desde la banda izquierda casi acaba en gol de no ser por el arquero Andrés Mehring, que tuvo esforzarse para enviar la pelota a córner.
El Rojo Matador salió en el segundo tiempo más decidido, dio un paso adelante y con ello descuidó la defensa, lo que fue aprovechado por el Liverpool para lograr el gol que se le había negado en la primera mitad.
A la tercera fue la vencida para los uruguayos, que obtuvieron el gol de la manera más fácil, con un pelotazo largo que recogió Ramírez, su jugador más talentoso, y él solo se bastó para cocinarse un golazo con un disparo que entró al arco por la escuadra.
Cuando parecía que el Liverpool lo tenía todo de cara para salir de Lima con un triunfo, Huancayo empató de manera inesperada, con un centro poco preciso de Ángeles que superó por arriba a Mehring, en una acción casi idéntica a la del final del primer tiempo.
Con el empate, Huancayo logró finalmente su objetivo de instaurar la anarquía táctica en ambos bandos y el partido se volvió de ida y vuelta. En ese intercambio, Ramírez estuvo muy cerca de volver a poner en ventaja al Liverpool en mano a mano que no supo resolver ante Pinto.
Segundos después, Lliuya, Valverde y Huaccha, los más gambeteros de Huancayo, lograban asociarse para que el primero disparase un cañonazo que obligó al arquero uruguayo a estirarse al máximo para evitar el gol.
Los locales buscaron el triunfo con ansias pero sin éxito en los minutos finales, y ahora estarán obligados a ganar de visitante en Uruguay o empatar al menos 2-2 para avanzar a los octavos final, donde espera el ganador de la eliminatoria entre el Coquimbo y el Estudiantes de Mérida.