Por: Rodrigo Almonacid
Ha repetido varias veces que está vivo de milagro. Una caída lo marginó medio año de las carreteras. Pero Rigoberto Urán, dos veces subcampeón del Giro de Italia y una del Tour de Francia, avisa que no se rinde y en el Tour Colombia 2020 pedalea para ser el de antes.
La condición física está en veremos, pero el carisma y desparpajo del pedalista colombiano están intactos. Los aficionados le piden fotos, que grabe mensajes en sus celulares y lo ovacionan cuando sube a la tarima de la carrera cafetera, una de las más importantes de América.
'He recibido demasiado cariño', dice en entrevista con la AFP en el hotel en la localidad céntrica de Paipa, donde estableció su base el EF Pro Cycling para el giro colombiano.
Urán, de 33 años, volvió a competir el martes en la contrarreloj por equipos que le dio una ventaja, para algunos insalvable, a la escuadra estadounidense. No pudo terminar los 16,7 kilómetros del trayecto, pero celebró haber vuelto a domar un caballo de acero tras un desplome que le pudo costar la vida.
'No pude aguantar el ritmo del equipo, pero me da mucha tranquilidad porque otra vez estoy en carrera, volviendo a tomar confianza', afirmó.
Rigo, como lo llaman propios y extraños, chocó con el suelo el 29 de agosto en la sexta etapa de la Vuelta a España-2019, en el que considera el 'peor' golpe de su vida deportiva: se rompió la clavícula izquierda, el omóplato en varias partes y aquejó perforación del pulmón izquierdo tras la rotura de dos costillas.
Sin el rótulo de favorito que carga respaldado por su palmarés, el ‘escarabajo’ se toma la tercera edición del Tour Colombia como una oportunidad para comenzar de nuevo.
Y de prepararse para un 2020 que, si todo marcha bien, lo tendrá nuevamente en suelo galo, en las vueltas a Cataluña y el País Vasco, algunas clásicas -Suiza o Dauphiné- y los Juegos Olímpicos de Tokio..