Compartir:
Por:  Edson Cabeza Jabba

A sus segundos Juegos Olímpicos. El atleta del registro del Atlántico Anthony Zambrano logró en el Meeting Resisprint, en La Chaux-de-Fonds, Suiza, la marca mínima para obtener su tiquete a Tokio-2020 y al Mundial de Catar.

Zambrano, que cumple con una gran temporada de preparación en suelo europeo, por fin pisó los 44 segundos en los 400 metros planos, la cifra que confesó quería lograr, en diálogo con EL HERALDO el pasado 25 de junio, días después de escalar hasta el primer lugar del podio en el Meeting Iberoamericano de Atletismo que se celebró en Huelva, España.

En territorio suizo, el velocista dejó su sello en 44 segundos y 68 centésimas. En esa final superó al italiano David Re (44.77) y al holandés Liemarvin Bonevacia (45.79).

'Me sobran palabras de felicidad, venía construyendo mi marca para los Juegos Olímpicos. Hablaba con mi entrenador y le decía que necesitaba ir a los Olímpicos y él me guió. Lo digo de corazón, me siento muy feliz. No sé dónde ponerme, dónde colocarme, pero es una felicidad muy grande. Cumplí al llegar a los 44 y ahora quiero 44.10 para ubicarme en lo más alto del podio en los Panamericanos. Con esa marca estaríamos peleando como finalista mundial y olímpico', expresó a EL HERALDO el velocista, que ahora ostenta el récord nacional en su modalidad. Derribó el 44.86 de Jhon Perlaza.

siempre picante. Zambrano se ha considerado siempre como 'una persona que no tiene pelos en la lengua' para expresar lo que siente. Tras conseguir su tiquete a Tokio-2020, el corredor de 21 años dedicó su triunfo 'a aquellas personas' que lo desprestigiaron.

'Me acuerdo cuando alguien se acercó a mí en la pista de los Juegos Centroamericanos y del Caribe y me dijo que yo servía era para boxeador y no para atleta. A esa persona, que me dijo esas palabras, le digo que si lo hizo para desmotivarme, lo siento. Eso me hizo más fuerte y el día que yo vea a esa persona le diré: ¿qué tal le va al boxeador? Yo digo las cosas y eso no está mal en esta vida. Entre más mal me traten, me tiren sátiras o me envidien, más fuerte me hacen. El único que me puede vencer es Dios'.

El sueño por cumplir. El oro en los Juegos Olímpicos siempre es uno de los sueños que tiene por cumplir Anthony Zambrano, pero hay uno que lo tiene entre ceja y ceja y que no está precisamente en las pistas de atletismo. Regalarle una casa a su madre, Miladis, es aún una meta por cumplir.

'Uno no tiene que ser mediocre y complacerse con una marca. Aquí sigo y vamos hacia adelante. Esto se lo dedico a toda Colombia, mis triunfos y mis récords. Siempre aplico en mi vida la siguiente frase: todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Él fue el que le dio la vida a mi madre y aquí ella tiene a un campeón. Solo pido el apoyo al alcalde Char para que me ayude a obtener lo que yo más quiero, una casa para mi madre', concluyó el atleta desde Europa.