Gabriela Bollé mostró su otra faceta, la de una adolescente que pisa la primavera de la madurez. En diciembre será mayor y élite para el BMX. Y ya lo asume afirmando que terminará la categoría junior en los Juegos Olímpicos Juventud en Buenos Aires en octubre y hacerlo de la mejor manera.
'Estoy en una madurez deportiva y el saber a los 17 años lo que quiero alcanzar'.
Con una gorra blanca, su cabello bien peinado con visos dorados cayendo sobre sus hombros, jean ajustados y tenis blancos, Bollé recordó que con su carrera del sábado en la pista nueva se ha dado que quiere y puede ser campeona mundial.
'Falta un poco dimensionar esto que he logrado. Dos carreras en el ciclo olímpico y ganando no he llegado a dimensionar.
Para ello espera cumplir su proceso para llegar al nivel de la campeona olímpica Mariana Pajón.
'Tengo que ganar más experiencias. Faltan más carreras. La meta es llegar a los Olímpicos. Siempre soñé con tener ese reconocimiento. Un día almorzando con Mariana Pajón, no la dejaban tranquila pidiéndole fotos y autógrafos. Y dije ojalá algún día pueda ser yo también ejemplo para los jóvenes. Con la medalla de oro subí un escalón. Este es un reto que tengo'.
Al bicicrocista Daniel Barragán, retirado por un accidente y uno de sus ídolos, lo recuerda. Antes de cada carrera se comunican a través de internet y con su triunfo lo incluyó en la lista a los que le dedicó la medalla.
Evocó que en el podio, con las lágrimas, la emoción del himno de Colombia, vio en la tribuna a sus amigos llorar. Entre ellos Isabella y otros tantos que llenaron el escenario. Y cómo visualizó la carrera para ganar aunque el final tuvo su suspenso por la definición.
'En la última curva, no sé cómo descifré eso. Frené y hasta vi la caída de Camila. Estaba muy lejos. Cuando vuelvo a mirar Camila tenía que quedar primera para ganar bronce por su empate con la mexicana. Y al final no se pudo. Fue una carrera interesante que no sé si se repetirá'.
A El Heraldo respondió tres preguntas tras su rueda de prensa.
La primera fue sobre qué enseñanza deja tras su exhibición para los deportistas barranquilleros y cómo enfrentar la presión de ser local que pudo superar por poner dos ejemplos: Shanny Torres, bronce en karate, y la eliminación de la tenista María Fernanda Herazo, por citar dos ejemplos.
'Yo empecé a pensar diferente desde el Mundial. Uno entrena para lo que uno quiere pero lo obtiene. Lo que es para uno lo es. Hay que competir lo más tranquilo. Tienes que competir para tí mismo. No competir por los demás ni para demostrar a otro. Son como unas vacaciones. Ahorras para divertirte y en el deporte te preparas con esfuerzo para disfrutar'.
Que reto considera le queda al deporte de la ciudad después de los juegos?
Que la pista de BMX, los estadios se mantengan. Esto te motiva. Tenerlos bien bonitos y traer competencias, juegos para mostrar que Barranquilla tiene escenarios y campeones de talla mundial.
¿Admira tanto a Mariana Pajón que algún día le vencerás?
Un día de esto la gente se va a sorprender y no será de la noche a la mañana. Es un proceso.