Compartir:

La presión y las ganas de devorarse la pista se veían en sus rostros. La samaria Kerstinck Sarmiento y el vallecaucano Edwin Estrada tenían una deuda pendiente tras haber alcanzado la plata y el bronce en los 300 metros, respectivamente. 

Los 500 metros sprint eran el ahora o nunca. La primera en salir a escena fue Kerstinck. La nacida en Pescaíto, popular barrio en Santa Marta, se veía inquieta antes de llegar al partidor. Incluso derramó lágrimas, pero luego, en la zona mixta, le confirmó a EL HERALDO que el motivo había sido 'que un mentol que le cayó en su rostro'.

Kerstinck, de 19 años, no decepcionó y se colgó su primer oro en unos Juegos Centroamericanos y del Caribe. 'Qué noche. Quería terminar de la mejor manera. Barrimos gracias a Dios', expresó la samaria que terminó con un tiempo de 44.935.

En la misma modalidad, el encargado de conseguir la cuarta y última presea de oro de la noche fue Edwin Estrada. Con un tiempo de 42.590 el caleño superó al venezolano Sebastián Guzmán (42.609) y Jorge Martínez (México).