A las cinco de la tarde James Rodríguez se fue de Santa Marta dejando a muchos de sus seguidores con la ilusión de tomarse una fotografía o tener el recuerdo de su firma estampada en un papel o en una camiseta.
El jugador del Bayern de Munich se despidió de los empleados del condominio Two Towers, donde tiene su lujoso apartamento, habiéndoles dejado presentes a varios de ellos.
Permaneció en Santa Marta tres días lapso durante el cual recorrió en yate las costas samarias, visitó el Parque Tayrona y jugó un picadito de futbol con unos amigos.
En esta ciudad pasó la navidad con su expareja Daniela Ospina y su hija Salomé.
El centrocampista colombiano viajó en un vuelo privado con destino a Medellín, de donde se trasladará posteriormente a la ciudad de Envigado.
‘Cazaselfies’ terminaron frustrados
Mientras James Rodríguez hacía deportes, un grupo de admiradores se daba cita en las afueras del edificio Two Towers con la ilusión de conseguir un autógrafo o hacerse una selfie con el capitán de la selección Colombia.
Sentados sobre la línea férrea y de cara al lujoso condominio, Carlos, Francisco y Javier, esperaban ansiosos la salida del ídolo. Habían madrugado pese a que la distancia del sitio donde viven al edificio donde se hospeda el ídolo es corta.
'Vivimos aquí en el barrio La Paz, pero llegamos a las 6 de la mañana para verlo salir a su jornada de entrenamiento', dijeron.
Sin embargo, solo a las 8:30 a.m. James se embarcó en una camioneta para ir a ejercitarse. Frustrados, los seguidores del volante del Bayern se resignaron luego de enterarse que su ídolo había emprendido viaje a Medellín.