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Por:  Hellen Benavides

La Selección Colombia femenina sub-20, que debutará este domingo en los Juegos Bolivarianos, enfrentando a Bolivia, se prepara por estos días en Barranquilla, en el Polideportivo de Monómeros.

Valentina Vivas, la guardameta de la Amarilla, como si se tratase de una narradora profesional, anima a sus compañeras desde el punto blanco: '¡Toque Manuela!', '¡Por fuera Valentina!', '¡Toquen por dentro!', '¡Tranquilas, tranquilas!', '¡El balón al área!', '¡Gooool!'.

Mientras que por el lado izquierdo de la cancha se encuentra el entrenador Carlos Quintero dando instrucciones de forma incesante: '¡Sin miedo! ¡Vamos! ¡Vamos!'. 

En las gradas se escuchan otras voces, las de las mediocampistas Natalia Acuña y Geraldine Saavedra, y la de la defensora Sara Páez, quienes reafirman una y otra vez las palabras sabias que minutos antes les había entregado su director técnico: '¡Con paciencia y tranquilidad todo llega! ¡Vamos! Vamos!'.

Esta última es la consigna que lleva el equipo femenino de nuestro país para los Juegos Bolivarianos que se disputarán en Santa Marta del 11 al 25 de noviembre, donde enfrentarán en la fase de grupos a la difícil Venezuela, con la que han caído en tres torneos distintos, y a Bolivia, Ecuador y Perú.

'Nos tocó en un grupo fuerte. Venezuela, por ejemplo, es muy buena, las jugadoras lo hacen muy bien y por eso nuestro afán de enfrentarnos con ellas. Queremos una revancha', dijo Manuela Vanegas.

Las 23 convocadas por el técnico Quintero arribaron a Barranquilla el sábado 28 de octubre y partirán el viernes 10 de noviembre a la perla de América con la ilusión de coronarse campeonas. 

'Estamos rodeadas de personas que saben mucho. Mis compañeras y yo venimos haciendo las cosas bien, por lo cual esperemos tener un buen resultado el domingo. Vamos con toda', declaró la volante Sara Pulecio.

Costeña camuflada. Maireth Pérez pertenece al Club Formas Íntimas de Medellín. Su acento paisa logra confundir a primera vista, pero su personalidad, carismática y alegre, dejan en evidencia su origen vallenato. 'Me fui a los 13 años de Valledupar a vivir a Medellín porque no había posibilidades de surgir como futbolista allá. La liga de Antioquia me llamó y me establecí en la ciudad de la eterna primavera un año sola y luego mi familia se fue a vivir conmigo', cuenta.

La jugadora se desempeña en la cancha como delantera y por segundo año consecutivo se ha quedado con el título de goleadora en la liga de Antioquia. 

'Maireth es una de las jugadoras más destacadas del equipo. Yo la tuve en la sub-17, el año pasado, y todavía estoy con ella', explica el entrenador.

Las damas del combinado colombiano no dudan de sus capacidades en el campo de juego y del cuerpo técnico que las acompaña. Están seguras, pero no confiadas, en que pueden tener una presentación impecable como la que han venido demostrando este año. 

'La meta de los bolivarianos es la medalla de oro', sentenció el técnico del cuadro femenino.