Compartir:

Rubén Darío Hernández cambió el fútbol por la docencia. El exdelantero quindiano, de 52 años, que alcanzó a anotar 189 goles en el fútbol colombiano, se dedica hoy a dar clases en un colegio y en una universidad del Quindío.

‘Rubencho’ o ‘El muchacho de la carrera alegre’, como también le decían, habló con EL HERALDO de su presente y de su carrera, expresando ese deseo que siempre tuvo de vestir la rojiblanca del Junior y la admiración que siente por el fútbol de Yimmi Chará. 'Tiene todas las condiciones y las cualidades que yo tenía', manifestó.