Compartir:

El bélico ambiente del barrio El Bosque, en Barranquilla, impulsó a Guiomar Peralta a la práctica de las artes marciales. Aprender a defenderse era casi que una necesidad cuando apenas alcanzaba los 12 calendarios. Robos, atracos e intimidaciones, rodeaban la vida de la monteriana que llegó a la Arenosa con solo 10 meses de nacida.

'Cuando estaba en el colegio Pestalozzi, la sensei Dolores Nieto enseñaba karate. Yo, al ser una persona introvertida que vivía en un barrio peligroso, decidí aprender defensa personal. Vivía con miedo y como llegaba tarde del colegio, era necesario', expresa Guiomar, nombre que recibió a raíz de que su madre, Silvia Márquez, le gustaba el nombre brasilero de la novia de su hijo mayor.

En 1998, en el IX Campeonato Mundial de Karate-Do que se efectuó en Varsovia (Polonia), Guiomar besó la gloria al alcanzar el tercer puesto en la modalidad kumite open. Una hazaña que le dio a su vida un giro de 360 grados.

'Cuando vengo del Mundial, Rodolfo Espinosa (gobernador) me regala una casa en el barrio La Candelaria. Mi vida cambió por completo porque conseguí cosas que tenía como meta. Tiempo después vendí la casa y me mudé al los Altos de Los Robles, donde resido actualmente', expresa la pequeña entrenadora que siempre se ha calificado como una persona 'perseverante' y que jamás se ha dejado 'intimidar', ni en los combates ni en su vida cotidiana.

Un 31 de octubre, tiempo después de alcanzar su medalla, Guiomar fue víctima de un intento de atraco.

'Nunca olvido ese 31 de octubre. Llovía mucho y cuando iba en una calle sola por mi barrio, un hombre me llegó por la espalda y me puso un chopo. Me dijo que le entregara los anillos y yo le dije que me los quitara él porque yo no le daría nada. Cuando sentí que lo tenía cerca, me volteé rápido y le hice una llave. Le quité el arma, se la mandé debajo de un puente y me le fui encima a pegarle. Luego la comunidad me ayudó', expresa hoy con una sonrisa Guiomar, mientras hace los movimientos de su heroico plan de defensa personal.

'Si a ti te van a atracar con un arma y tienes a la persona cerca puedes defenderte, siempre y cuando sepas hacerlo, pero si está lejos, entrega todo', agrega.

Forjadora de campeones

Su vida como maestra es igual de exitosa a su carrera deportiva. Déiner Medina, Luz Mery Locarno, las hermanas Pezzoti (Andrea, Gabriela y Valentina), Apelis Mercado, Shanee y Sharon Torres, son prueba de ello.

'Todos esos jóvenes han estado conmigo desde pequeños. El primero en ganar a nivel internacional fue Déiner. Ganó en Suramericano infantil en Ecuador. Apelis Mercado lució en un Mundial en España. Todas han ganado. Shanee es una de las que más lejos ha llegado. Ha sido campeona Panamericana, Centroamericana. Ha ido a Mundiales', expresa la maestra de 46 años.

Guiomar adquirió en el barrio La Candelaria un prestigio y sus vecinos, sobre todo los niños y niñas, al ver sus medallas, se interesaron por el karate.

'En mi casa tenía muchos trofeos. Nacionales, Departamentales, Regionales, de todo. Eso emocionaba a los niños y me pidieron que los entrenara. Por eso nace el Club Isami, el cual cumple 15 años este 2017 y ahora tengo 59 deportistas con edades desde los 4 años'.

Lucha por la igualdad

'Muchas personas me decían que al practicar karate me volvería machorra, que me dañaría mi cuerpo', recuerda Guiomar, subcampeona Panamericana en Canadá, un año después de celebrar en tierras polacas.

Es fiel defensora de la igualdad de género. Con puños y patadas se ha ganado un nombre en el deporte y ha expandido sus conocimientos.

'Estudié Administración de Empresas, soy Analista y Programadora de Sistemas y estoy terminando una Maestría en Entrenamiento y Gestión Deportiva en la Universidad Iberoamericana de España'.

Lo que se hereda no se hurta, pueden decir Juan David (15 años) y Miguel Ángel Castilla (10 años), hijos de Guiomar y quienes conquistaron medallas en un reciente Torneo Nacional de Karate Do en Cali.

'Mis hijos han seguido mis pasos. Espero verlos en unos Juegos Olímpicos ya que la disciplina fue avalada a partir de Tokio 2020'.