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Por:  Rosember Anaya

Hosman Andrés Gómez lleva el ráquetbol en las venas. Su padre Olimpo Gómez, un caleño de 58 años ha dedicado 25 de ellos a la práctica y la enseñanza de esta disciplina en Barranquilla. Hosman heredó de su padre la pasión por este deporte, ya son 17 años lo que tiene como experiencia y poco a poco ha ido recogiendo sus frutos. Recientemente Gómez fue subcampeón del US Open que se disputó en Minneápolis, Estados Unidos, pero sus retos son más altos. 'Quiero seguir surgiendo y ser el número uno de Colombia', apunta con seguridad

Gómez desea que el ráquetbol evolucione más en Barranquilla y que los jóvenes se interesen por practicar este deporte. 'Es importante que se hagan canchas públicas y que no solo sea un deporte privado. Les va a gustar porque contiene mucha adrenalina', sostiene el jugador de 32 años.

La exigencia de Hosman es doble, pues él no solo tiene que prepararse como jugador, también es entrenador de esta disciplina y se exige al máximo. Su deseo es que el ráquetbol en Barranquilla esté en un nivel alto y que se destaque a nivel mundial. 'Combino las dos cosas. Me entreno físicamente para poder rendir, reparto mis días. Ser entrenador me ayuda a corregir mis falencias, pero también tengo personas que me orientan. Me gusta enseñar y que otras personas adquieren mis conocimientos', sostiene.

Gómez cierra su ciclo de competencia en noviembre y espera terminar el año con buenos resultados y dando buenos golpes para seguir elevando su nivel.

Ráquetbol para todos

Juan Carlos Linero, representante de la Liga de ráquetbol en el Atlántico, lidera el programa ‘Ráquetbol para Todos’, que busca que este deporte se masifique en el Atlántico. 'Queremos tener más campeones de ráquetbol, así como Hosman Gómez y Set Cubillos. También buscamos un espacio alternativo para los niños', expresó Linero.

Otro de los objetivos que pretende Juan Carlos es que el ráquetbol se practique en canchas públicas.