AUGUSTA, GEORGIA. Empezó la fiesta del golf. Jordan Spieth retomó el paso que llevaba hace un año en Augusta National. Otra ronda repleta de birdies.
Luciendo como el jugador que irrumpió a un dominante triunfo en 2015, el texano de 22 años finalizó seis bajo par, 66, durante un ventoso jueves en Augusta National, para ubicarse en un lugar conocido: la cima de la tabla.
Spieth impuso una marca del torneo con 28 birdies en 2015, terminando como líder luego de cada ronda en camino a una tarjeta de 18 bajo par y su primer major. Ese fue el inicio de uno de los mejores años en la historia del golf. Ganó el Abierto de Estados Unidos en Chambers Bay, apenas se quedó fuera del playoff en el Abierto Británico y terminó solo detrás de Jason Day en el Campeonato de la PGA.
Day es actualmente el mejor jugador del mundo y llegó al torneo como favorito en las apuestas. Sin duda lució como tal por la tarde, firmando tarjeta de 5 bajo par, 31, en los primeros nueve, para mantenerse a un golpe de la cima.
No es sabio esperar que Spieth se intimide.
'Mantenemos la paciencia con lo que hacemos', afirmó. 'Sabemos cómo ganar este torneo'.
Spieth embocó seis birdies, todos de menos de 15 pies (4,5 metros), y se mantuvo libre de bogeys con unas salvadas espectaculares, la más notable en el par 3 del hoyo 4, cuando logró un putt en subida y bajada desde un lado engañoso del green.
A pesar de que el campo se suavizó debido a las tormentas de la noche anterior, el viento que sopló por Augusta National dificultó los buenos marcadores. Pero pareció no molestar a Spieth, quien busca convertirse en apenas el cuarto jugador que gana el torneo en años consecutivos.
Tiger Woods fue el último en hacerlo en 2001 y 2002. Los otros: Jack Nicklaus y Nick Faldo.
Entre los que finalizaron por la tarde, el inglés Paul Casey y Justin Rose fueron los perseguidores más cercanos de Spieth, ambos con rondas de 69 golpes. El cuatro veces ganador de majors, Rory McIlroy, a quien solo le falta el Masters para completar el Grand Slam, salió en el último grupo del día.
Uno de los grandes nombres prácticamente se hundió en el primer hoyo.
Ernie Els requirió de siete putts, sí, siete, para terminar con un séxtuple bogey de 10 golpes, el marcador más alto en la historia del hoyo de 445 yardas conocido como 'Tea Olive'. Nunca nadie había logrado más de ocho golpes.
El Masters de Augusta se puso en marcha con un par de tiros ceremoniales de Nicklaus y Gary Player.
Arnold Palmer, de 86 años, observó desde una silla en el primer tee, y decidió no realizar su swing este año debido a problemas de salud. Así que Nicklaus y Player realizaron los disparos que marcan el comienzo del primer major del año.