La manera como las empresas actualmente impactan al mundo están haciendo eco en las sociedades. Los roles han cambiado, las organizaciones se abren a invertir en entornos saludables que aporten valores educativos y buenas practicas que protejan al medio ambiente.
En busca de ese equilibrio las compañías en Colombia vienen acogiendo el concepto de Responsabilidad Social Empresarial en los objetivos que persiguen. Se trata de una gran oportunidad para impulsar el desarrollo y el crecimiento de las regiones. La adopción voluntaria de buenas prácticas en torno a la responsabilidad social con los grupos de interés, dice mucho de las empresas.
Es importante tener presente que en estos tiempos el significado de Responsabilidad Social repercute en la competitividad de las empresas, ahora es fundamental preservar el medio ambiente, identificar a los empleados con su organización y respetar sus derechos y contribuir a la estabilidad social de la comunidad.
Carlos Mario Uribe Urán, Director de la especialización en Gerencia Social de la Universidad Simón Bolívar y Magister en desarrollo Sostenible y Medio Ambiente señala que la responsabilidad social es el compromiso, obligación y deber que poseen los individuos, miembros de una sociedad, una organización o una empresa, de contribuir voluntariamente para una sociedad más justa, conjuntamente con la protección del ambiente.
La Responsabilidad Social Empresarial, en términos muy simples y comprensibles para cualquier público, es realizar negocios que estén basados fundamentalmente en principios éticos y sólidamente apegados a la ley, por lo que esta premisa por sí sola encierra el concepto anterior. La empresa (no el empresario) tiene un rol fundamental e importantísimo al interior de los entornos en los cuales opera y, por consiguiente, ante las comunidades y la sociedad en general.
La RSE no es hacer filantropía, como muchos parecen creer. No se busca que las empresas se conviertan en obras de beneficencia, pues evidentemente no están constituidas para ese propósito, sino para ser rentables, generar ganancias y crear utilidad para sus accionistas, precisa Uribe Urán.
Sin embargo, ser socialmente responsables sí implica que las empresas adopten posturas activas y responsables, en torno al impacto de sus operaciones en los lugares donde se establecen. Esa cultura es una forma de hacer negocios que les garantiza a las empresas u organizaciones mayor sostenibilidad a lo largo del tiempo, mayor crecimiento económico y mejor posicionamiento social con las comunidades, en donde el compromiso que asumen al mismo tiempo, de manera ética y consiente con el desarrollo y el crecimiento de los entornos, les garantiza mayor crecimiento, mejores rendimientos, mejores utilidades y el adecuado
R.elacionamiento social que favorece sus operaciones.
Hoy -agrega- se ofertan programas de posgrado como la Especialización en Gerencia Social de la Universidad Simón Bolívar, en Barranquilla, en el que se hace hincapié entre muchos otros factores de la gerencia de las empresas, en la RSE como un importante elemento de formación de los profesionales, que sin renunciar al concepto desde el punto de vista de lo que representa dirigir y administrar para la obtención de las mejores utilidades y resultados para el mercado en el que operan las organizaciones y la maximización de sus utilidades, forme profesionales bajo la estricta capacidad de contribuir al mejoramiento y transformación a nivel local, regional y nacional, con una gestión basada en valores éticos, autonomía, pensamiento crítico y responsabilidad social.