Las lecciones aprendidas con la covid-19, que no han sido reflejadas totalmente, muchas sin entender como un organismo tan pequeño pudo causar tantas dificultades, a octubre del 2024 más de siete millones de fallecimientos, pero relacionados con la covid-19, hay otros 15 millones, lo que aumenta a un total de más de 20 millones, durante 5 años. Además, se deben considerar pérdidas socio económicas, disminución en la educación, turismo, pérdidas de profesionales sanitarios y, el desmoronamiento de los estados financieros de los países, por gastos inesperados. La gran cantidad de muertes y daños en salud hacen pensar que después de 5 años, deberíamos tener un plan, que no existe en la actualidad.
Los líderes, las instituciones y, en general, los organismos y otras personas, relacionados con la salud, tenemos que estar alertas a una situación tan impactante, teniendo en cuenta las pérdidas de vidas, secuelas y desmoronamiento social y financiero, nos han hecho pensar que de repetirse podría ser de acciones impredecibles y trágicas. Sin negar que otras situaciones, como la violencia, la pobreza, la desnutrición, y en general, todas aquellas ligadas al abandono de los gobiernos, a la corrupción y al cumplimiento o violación de políticas locales, regionales e internacionales, se relacionan directa o indirectamente con los resultados.
¿Con qué contamos? Políticas públicas, locales, regionales, nacionales e internacionales. Todas fallaron durante la pandemia, porque pese a todos los esfuerzos, no se cumplieron o si lo hicieron, su cumplimiento parcial, han contribuido a continuar durante ya más de cinco años, sus defectos y como consecuencia, un fuerte impacto todavía difícil de totalizar.
Instituciones como la Organización Mundial de la Salud, OMS, no dieron órdenes o recomendaciones, que pudieran prevenir sus desastrosas repercusiones, fueron retardadas o cumplidas tardíamente. Hay que renovar, cambiar o restablecer, organismos con la capacidad de comandar para todo el mundo, una defensa que no existió durante la pandemia, sin desconocer las características del agresor, un virus mutante con una capacidad de daños en el ser humano, todavía con capacidades y funcionamiento, sin entender.
Con una buena capacidad y respuesta, las demás instituciones podrían ayudar a un desenvolvimiento mucho mejor al realizado durante la pandemia, sin demeritar actuaciones que evitaron muchas defunciones. Problemas actuales, uno de los mayores promotores, financieros y científicos, USA, se ha retirado de la OMS. Los malos entendimientos políticos nos llevarán, en próximas pandemias, a un desastre mayor, cuando no logramos tener y practicar, los avances obligatorios que, no le llegan sino a unos cuantos.
Si las instituciones internacionales tienen una gran responsabilidad, las nacionales, regionales y locales, también deben aportar unas acciones importantes. Prepararse para una lucha que nos permitirá tener recursos para prevenir sus consecuencias, es fundamental y responsable.
No tenemos personal entrenado, ni siquiera se han elaborado programas, para lograr las mínimas capacidades de personal, en donde tienen que participar, el Ministerio de Salud, el Instituto Nacional de Salud, las Secretarías de salud, las instituciones de educativas, universidades, centros tecnológicos, bajo el liderazgo responsable de un grupo permanente de expertos.
Reforzamiento y mejoramiento, con nuevas estructuras diagnósticas, de manejo y de tratamientos actualizados. Con las que la Inteligencia artificial nos puede apoyar.
Investigación, innovación y producción, de medios y elementos científicos-tecnológicos, para el avance y conocimiento de las posibles o futuras llegadas de viejos o nuevos patógenos que incluyen nuevas y disponibles vacunas.
Las políticas públicas, deben involucrar, elementos permanentes de vigilancia y control de enfermedades, con la participación de la empresa privada y el apoyo de medios internacionales, laboratorios farmacéuticos y todos aquellos, que directa o indirectamente contribuyan a evitar la repetición de un evento tan catastrófico, como una pandemia.
@49villanueva
