El oro es uno de los productos que tiene buen comportamiento.

En los últimos dos años los precios de los commodities han registrado una fuerte disminución, debido principalmente a la desaceleración de la economía en los principales mercados emergentes.

Sin embargo, ahora lo más relevante para la economía colombiana es el comportamiento que debemos esperar de los precios de los productos básicos en los próximos meses.

En las últimas semanas el precio del petróleo ha experimentado una importante recuperación, alcanzando incluso a superar los 50 dólares por barril. No obstante, las expectativas para los próximos meses no permiten afirmar que esta nueva tendencia se va a mantener. Según la Agencia Internacional de Energía, los inventarios de petróleo mundial crecerán durante los próximos meses a una tasa de 0,8 millones de barriles por día, por lo que no se espera que el precio del petróleo supere los 50 dólares por barril al finalizar 2016.

Por otra parte, por similares razones, la expectativa de los precios de otros minerales como el níquel y el carbón es que se mantengan también con bajos precios en el corto plazo.

Uno de los pocos productos donde se espera un comportamiento diferente es el oro, lo cual es explicado por ser utilizado por los inversionistas preocupados, como refugio por el panorama económico mundial.

En el último año el precio del oro aumentó en más de 9% y se espera que mantenga esta tendencia mientras se recupera el precio de los demás productos básicos.

Este escenario de bajos precios en la mayoría de los commodities debe terminar en algún momento. Los países importadores de materias primas se benefician de la baja de los precios de los productos y eso debe traducirse en un mayor crecimiento de esas economías y, por lo tanto, una mayor demanda de estos productos básicos, lo que incrementará su precio. Sin embargo, se necesita tiempo para que todos estos ajustes se den, y, por lo tanto, los países exportadores como Colombia deberán soportar aún varios meses de bajos ingresos externos.

*Profesor del IEEC, Uninorte. Las opiniones expresadas aquí son responsabilidad exclusiva de los autores y no comprometen la posición de la Universidad ni de EL HERALDO.