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El mercado laboral colombiano está experimentando un giro inesperado. Durante años, la prioridad de los trabajadores ha sido un buen salario, pero un reciente estudio de Deel, realizado por la consultora Opinaia, ha revelado que una parte significativa de los empleados en el país ahora está dispuesta a reducir sus ingresos a cambio de algo que, para muchos, no tiene precio: el tiempo libre.

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Según los hallazgos del estudio, el 37% de los colombianos optaría por ganar menos dinero si eso les permitiera tener más tiempo libre. Este cambio de mentalidad refleja una transformación en las prioridades laborales, en la que el equilibrio entre vida personal y trabajo toma mayor relevancia. Pero, ¿a qué se debe este fenómeno?

Uno de los factores determinantes es la creciente valoración de la flexibilidad y la autonomía. La encuesta señala que el 73% de los colombianos prefiere el trabajo independiente, mientras que el 51% favorece los modelos híbridos, una tendencia que ha cobrado fuerza en los últimos años.

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Dentro de este grupo, el 72% manifiesta su deseo de seguir con este esquema laboral, lo que indica que la rigidez del trabajo presencial está perdiendo atractivo.

Las prioridades de los trabajadores colombianos

Las razones detrás de este cambio no son sorprendentes si se observan las prioridades generales de los colombianos. La familia encabeza la lista de lo más importante en la vida, con un 91% de los encuestados, ubicándola en el primer lugar.

Le sigue el trabajo (51%), las experiencias de viaje (49%) y el desarrollo profesional (47%). Este nuevo panorama sugiere que la gente está buscando opciones laborales que les permitan disfrutar más de su tiempo personal sin sacrificar completamente sus ingresos.

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Natalia Jiménez, Directora Regional de Deel para Latinoamérica, explica que esta inclinación por la flexibilidad es una tendencia cada vez más fuerte, especialmente entre las nuevas generaciones.

“La inclinación hacia la flexibilidad es una tendencia cada vez más fuerte, sobre todo en las nuevas generaciones. Esto obliga a las empresas a replantear sus modelos laborales para atraer y retener talento”, afirma.

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Otro dato que refuerza este cambio es la percepción positiva que tienen los colombianos sobre su trabajo. El 78% de los encuestados asocia su vida laboral con emociones favorables, y el bienestar (18%) y la autonomía (14%) son los sentimientos más mencionados en relación con su empleo.

Los jóvenes se interesan más por los empleos en el extranjero

Sin embargo, la búsqueda de mejores oportunidades no se detiene en las fronteras del país. El estudio también reveló que el 91% de los jóvenes colombianos estaría dispuesto a mudarse al extranjero si eso significara acceder a un mejor empleo, mientras que el 97% valora la posibilidad de trabajar con profesionales de otros países.

Entre las profesiones más solicitadas por jóvenes de entre 18 y 28 años se encuentran los intérpretes y traductores, los especialistas en desarrollo de negocios, los ingenieros de software y los desarrolladores de software.

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A medida que las tendencias globales redefinen el mundo del trabajo, Colombia no se queda atrás. La flexibilidad, el bienestar y las oportunidades internacionales están marcando la pauta de una nueva era laboral en la que el dinero ya no es el único factor determinante.